Por Leticia Villaseñor

Cuautla, Mor., 24 de mayo.- En el segundo día de trabajo los peritos sacaron de la fosa de Tetelcingo cuatro cadáveres, a los que realizaron la toma de muestras de ADN para su identificación; tres de ellos contaban con un número de averiguación previa.

Tras más de 30 horas de iniciada la diligencia para la exhumación de los 116 cuerpos que la dependencia gubernamental asegura hay el la fosa localizada en la comunidad de Tetelcingo, municipio de Cuautla, región oriente del estado, con un sol a plomo y una temperatura superior a los 42 °C, a las 12:23 horas, fue extraído el primer cuerpo de una de las fosas que corresponde a la Fiscalía Regional Oriente. Con ese primer cuerpo fueron exhumados tres cuerpos más, informó el Fiscal morelense Javier Pérez Durón.

La diligencia terminó alrededor de las 16:00 horas ya que el proceso de cada cadáver lleva un aproximado de una hora. En este caso, la toma de muestras se hizo a cuerpos y se pudo extraer la muestra del fémur de cada uno de ellos.

El procedimiento realizado por servicios periciales de la Fiscalía estatal, con ayuda de  peritos de la Procuraduría General de la República (PGR), Policía Federal (PF) y científicos de la Universidad Autónoma del Estado de Morelos (UAEM),  establece que una vez que se sacan los restos humanos y se toman el registro de cada exhumación, el cuerpo se embala de manera adecuada, se aparta y en grupos de cinco y se llevan hasta el panteón Jardines del Recuerdo, ubicado en la carretera México-Oaxaca, donde fueron re-inhumados en una de las 25 fosas con capacidad de 10 cuerpos, cuya construcción se ordenó a principios de año y el monto ascendió a los 2.1 millones de pesos.

El horario de trabajo indicado por la Fiscalía es de las 6:00 a las 18 horas, y se tiene un estimado que llevará al menos dos semanas.

Las autoridades difundieron  que los cuerpos exhumados de la fosa no pueden ser exhibidos públicamente al estar obligada la fiscalía al cuidado y protección a la intimidad de los restos humanos, como lo establece la ley General de Víctimas del país y la del estado.

Lo anterior porque durante el segundo día de la dirigencia, Servicios Periciales amplió seis metros más el perímetro dispuesto para resguardar la zona, además, cuando se realizó la primera y segunda exhumación se hizo cubriendo las labores de la toma de pruebas de ADN, lo que provocó la molestia de los familiares de desaparecidos, quienes también denunciaron la existencia de una tercera fosa, por lo qué exigieron la presencia del Fiscal estatal Javier Pérez Durón.

Ya en el lugar, el Fiscal primero desmintió la existencia de una nueva fosa pero aclaró que de existir se iniciará una investigación de inmediato. Después quitaron una de las lonas que cubría parcialmente el lugar de trabajo e impedía que los familiares de víctimas se percataran de los trabajos con mayor transparencia.

En la fosa no fue lo único que se encontró. Los cuerpos estaban dispuestos de una forma irregular, presumiblemente aventados sin ninguna precaución por el personal de la Fiscalía que en diciembre de 2014, realizó la exhumación de Oliver Wenceslao y una maestra, ambos identificados por sus  familiares y a pesar de ello inhumados de forma irregular en dicho lugar, además se encontraron trajes de los peritos así como cubrebocas.

“No hubo el procedimiento adecuado de la escena, llegamos a la misma palabra ‘respeto, dignidad del cadáver’. Deja mucho qué desear dicha diligencia, pareciera que luego de realizar la re-inhumación el personal además arrojó los trajes y cubrebocas sobre los cuerpos”, detalló Abimelec Morales, jefe del equipo técnico de la Universidad Autónoma del Estado de Morelos (UAEM), cuyo equipo participa como coadyuvante en la exhumación a petición de una madre de familia que espera localizar el cuerpo de su hija, desaparecida desde 2014.

Además, abundó, el embalaje sólo consistió en envolver a los cuerpos en plástico negro con amarres en ambos extremos, es decir, no se ocuparon las bolsas especiales ex profeso.

 

Beneficio de la duda a la Fiscalía: víctimas

María Concepción, madre de Oliver Wenceslao, y una de las principales promotoras para la apertura de las fosas, pidió el beneficio de la duda a la Fiscalía para que esta dependencia dé la información “tal cual es”, además reconoció de que a pesar de que el personal a cargo de Pérez Durón “pareciera actúa por  voluntad propia para entorpecer las labores, el funcionario ha demostrado tener disponibilidad para que ésta se lleve a cabo sin mayores retrasos”, declaró.