Redacción SL
Cuernavaca, Mor., 7 de noviembre.- En la sexta caminata por la paz que realizó la Diócesis de Cuernavaca de manera virtual, por la contingencia sanitaria del covid-19, se leyeron testimonios de familias víctimas de cobro de piso, de feminicidio y un sobreviviente al coronavirus.
La marcha se realizó al interior de la Catedral de Cuernavaca y el primer testimonio fue de un hombre que se vio obligado a dejar su empleo de mototaxista porque los integrantes del crimen organizado le pidieron una cuota de mil 500 pesos mensuales para seguir trabajando de lo contrario, advirtieron, que habría consecuencias.
“En la comunidad se escuchó que pedían piso, pero a los que pertenecían a la agrupación de mototaxis no les habían pedido aún, pasaron casi dos meses de que llegó ese rumor al pueblo, hasta que un día el líder de la agrupación convocó a los mototaxistas y les informó que le marcaron por teléfono porque tenían que pagar si querían seguir trabajando. “El pago era de mil 500 pesos mensuales por cada unidad, por seis meses, y el que no pagara tenía que atenerse a las consecuencias”, se leyó durante la caminata.
Esta situación generó pánico entre los mototaxistas de la comunidad y algunos dejaron de trabajar y otros vendieron sus unidades por miedo a las represalias por no pagar derecho de piso.
Otro testimonio, que escucharon los pocos asistentes a la caminata, fue del doctor Osorio sobreviviente al Covid-19, y quien pasó mes y medio entubado en un hospital.
Narró que el 12 de junio empezó a presentar algunos síntomas con diarrea, dolor de cuerpo y dificultad para respirar, por lo que sus compañeros de terapia intensiva le informaron que debía quedarse en el hospital. Estuvo una semana en el nosocomio y tras las complicaciones fue necesario entubarlo.
“Es una enfermedad muy dolorosa y fue necesario transfundirme plasma de compañeros que han padecido Covid-19, durante mes y medio estuve dormido, no me di cuenta, fue como un sueño, y desperté después de estar en terapia intensiva.
Los médicos me daban un cinco por ciento de vida pero Dios es grande y con la ayuda del personal médico estamos aquí”, expresó durante la caminata por la paz.
El 18 de agosto, como un regalo de cumpleaños presentó mejoría, y lo dieron de alta.