Cuernavaca, Mor., 28 de octubre.- «En los últimos 30 años el consumo de maíz y tortilla tuvo un descenso del 40 por ciento per cápita por mexicano», señaló Rafael Mier Sáenz, presidente de la Fundación Tortilla de Maíz Mexicana, al impartir conferencia virtual La importancia del maíz nativo, durante el IV Foro de Extensionismo, en el Desarrollo Rural y la Seguridad Alimentaria, que realizó hoy la Facultad de Ciencias Agropecuarias (FCA) de la Universidad Autónoma del Estado de Morelos (UAEM).

Entre los factores de la caída del consumo de tortilla en los últimas décadas, se encuentra “una pérdida de calidad de este producto debido al cambio en el uso de tipos de maíces híbridos, transgénicos o harinas instantáneas, que son más productivos y muy similares, pero que carecen de la gran diversidad nutricional de los maíces criollos o tradicionales, además de la compra de maíz estadounidense en lugar de apoyar al desarrollo de productores locales”, dijo.

Rafael Mier dijo que México produce 27 millones de toneladas de maíz al año, sin embargo, importa 16 millones de toneladas principalmente para el consumo animal, “hay más de 2 millones de productores de maíz y más de 100 mil tortillerías que generan una importante derrama económica, pero sobre todo, la capacidad nutrimental que posee el maíz de brindarnos salud y bienestar alimentaria a un precio accesible, mediante una enorme diversidad de platillos gastronómicos”.

Mier Sáenz agregó que a pesar de ser un estado pequeño en extensión, Morelos cuenta con una gran diversidad de maíces, siendo el maíz ancho pozolero el más conocido, mientras que el cacahuazintle, pepitilla, olotillo, cónico y tuxpeño, los más comunes de la región.

Detalló que la tortilla es la principal fuente de proteína y calcio de la población mexicana, por lo que es fundamental promover que tengamos acceso a un buen maíz, “que no está relacionado con el desarrollo de enfermedades como la diabetes, por el contrario, en el momento que los mexicanos cambian su dieta y dejan de comer maíz y tortillas, hay cambios negativos en la salud de la población”.

El promotor del maíz, Rafael Mier abogó por la iniciativa de la Ley para el fomento y protección del maíz nativo, como una política pública y mecanismo de protección para conservar a los maíces, como ejercicio de un derecho y la preservación de la cultura de la buena alimentación de los mexicanos.

Finalmente, señaló la necesidad de legislar los cambios en la norma del libre mercado en la producción, venta y consumo de la tortilla, referente a la regulación del uso de aditivos, colorantes e información al consumidor de los riesgos del consumo de tortillas industrializadas y elaboradas con maíz transgénico.

Cabe destacar que el IV Foro de Extensionismo, en el Desarrollo Rural y la Seguridad Alimentaria, fue organizado por el cuerpo académico Estudios de desarrollo rural de la FCA y la División de Socioeconómicas de la Universidad Autónoma Agraria Antonio Narro (UAAAN), a través del cuerpo académico Desarrollo sustentable y procesos sociales, y contó con la participación de productores que compartieron sus experiencias en la implementación de diversos proyectos.

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