Durante décadas, Amou Hajihabía evitó comer alimentos frescos y ducharse por temor a contraer una enfermedad
Amou Haji murió el domingo en el pueblo de Dejgah, en la provincia de Fars (sur de Irán), indicó la agencia de noticias IRNA.
Era conocido como «el hombre más sucio del mundo» por no haberse duchado en décadas, debido a su miedo a «enfermarse». Pese a su falta de higiene, Haji vivió muchos más años que el promedio en su país, donde los hombres tienden a fallecer a los 77 años.

Amou Haji nunca se casó y según se sabe no tenía familia. Sin embargo, los vecinos de Dejgah lo consideraban alguien cercano y le tenían cierto afecto y, según los informes, le construyeron una choza con bloques de cemento para que no durmiera en la intemperie en un agujero en el suelo.
En los últimos años, Hajji se convirtió en casi un evento turístico, con personas que publicaban videos de su extraño comportamiento, que incluía fumar hasta cinco cigarrillos a la vez o aspirar estiércol de una tubería de metal.

En el último tiempo se le realizaron estudios médicos por parte especialistas británicos con el objetivo de hallar alguna enfermedad en el hombre. Sin embargo, los estudios clínicos y de laboratorio dieron cuenta de la buena condición de salud que poseía.
El tratamiento fue dirigido por el profesor experto en parasitología, el Dr. Gholamreza Mowlavi, de la Escuela de Salud Pública de Teherán, quien lo convenció de que le permitiera realizar algunas pruebas. Allí se descartó el VIH, hepatitis y tampoco encontraron bacterias o parásitos, a excepción de la Triquinosis que no le afectaba por haber desarrollado un “sistema inmunológico muy fuerte”.