Redacción SL
Cuernavaca, Mor., 9 de mayo.- Con el objetivo de establecer las bases para dar certeza a los productores apícolas del estado de Morelos, e incorporar el principio de seguridad alimentaria, las y los diputados de la LIV Legislatura, aprobaron modificar la Ley de Salud en la entidad, para establecer entre otras cosas, que la Secretaría de Salud coadyuvará con la Secretaría de Desarrollo Agropecuario en materia de inocuidad de los productos y subproductos apícolas y los procesos de polinización.
Durante la sesión ordinaria que tuvo lugar este día, los legisladores emitieron su voto aprobatorio para establecer en el artículo 334 Bis del citado ordenamiento, que la Secretaría de Salud, fomentará el principio de seguridad agroalimentaria, con la finalidad de garantizar las bases de la producción de los alimentos medicinales, a partir de la polinización de los productos de las abejas.
Asimismo, precisa el concepto de apiario en el artículo 132 inciso III, para establecer que los éstos son el “conjunto de colmenas pobladas e instaladas en un lugar determinado y regulado para la cría, reproducción y mejoramiento genético de las abejas”.
En el dictamen que presentó la Comisión de Salud, que preside su mismo diputado iniciador José Luis Galindo Cortez, establece que datos de la Sagarpa, indican que la producción de miel en Morelos durante el año 2017 fue de un volumen de 1924 toneladas, y con número de 66,180 de colmenas registradas, y que de acuerdo con este informe, la entidad se ubica dentro de la media nacional de productores de miel.
Asimismo, destaca que la miel de Morelos recientemente fue galardonada como una de las favoritas en el Continente Europeo, y que la apicultura es considerada de gran importancia para la seguridad alimentaria de los países, por su efecto sobre la polinización de cultivos comerciales.
“Debemos establecer mediante una acción legislativa medidas de protección y preservación, así como políticas de buenas prácticas que han resultado en otras partes del mundo, como es la agroecología, que es una práctica agrícola sostenible que ayuda a reducir su exposición a las abejas de los plaguicidas”, destaca el documento del dictamen aprobado.