El Gobierno que encabeza Cuauhtémoc Blanco Bravo tiene el compromiso firme de revivir la producción de amaranto en la región oriente de la entidad, y recuperar el liderazgo que el estado perdió porque las pasadas administraciones abandonaron al campo y con ello a este cereal.
La recuperación de esta siembra dará inicio en esa zona, donde la mayoría de las familias se dedica a la elaboración de dulces tradicionales como la alegría, palanqueta, obleas, y otras golosinas derivadas de esta semilla, por sus propiedades alimenticias.
El primer día de este mes, Katia Isabel Herrera Quevedo, titular de la Secretaría de Desarrollo Agropecuario (Sedagro), y Daniel Robles Echegaray, representante de Grupo Alimenticio Roech S. de R.L. de C.V., firmaron un convenio de colaboración, que en una primera etapa beneficia a los amaranteros del estado.
A decir de Robles Echegaray, Morelos tiene tierra fértil, un clima envidiable y la experiencia de los agricultores para recuperar el amaranto y poder competir con estados como Tlaxcala.
El modelo de negocio está diseñado de manera tal, que los trabajadores del campo, mujeres y hombres, tienen garantizada una buena cosecha y la venta de toda su producción.
“Ellos aportan sólo sus tierras, las trabajan y nosotros los acompañamos con todo el paquete tecnológico: fertilizantes, fumigación, aportación de la semilla, y al finalizar el contrato se les compra”, expresó el representante de Grupo Alimenticio Roech.
La convocatoria para acceder a los beneficios señalados está por salir, será a través de la Sedagro, y se pretende que de manera inmediata dé comienzo el trabajo en las parcelas de siembra.
Daniel Robles explicó que la idea es arrancar con 100 hectáreas, lo que podría tener un rendimiento aproximado de mil 200 kilos por cada una; el tope para atender este esquema sería hasta mil.
En una segunda etapa, se tiene contemplado replicar este modelo de negocios en otros municipios y ampliarlo a otros productos del campo morelense.
Por último, el entrevistado indicó su agradecimiento al Gobierno de Morelos por “abrirle la puerta, puesto que es momento de hacer equipo, crear alianzas y estrechar lazos” para dar oportunidades a los campesinos.