Por Leticia Villaseñor
Miacatlán, Mor., 22 de julio.- La caravana «Sí a la vida y por la Defensa del territorio» realizó un recorrido por la zona sur, donde la empresa Alamos Gold pretende instalar mineras.
El trayecto inició en la capital morelense, de ahí su primera parada fue en la comunidad indígena de Alpuyeca, en Xochitepec, luego partió rumbo a Coatetelco, Miacatlán, en seguida siguió a Mazatepec y finalizó en Cuentepec, Temixco.
Pasadas las 13:00 horas, una veintena de carros con la leyenda «Si a la vida», entró al recién declarado municipio autónomo indígena de Coatetelco para manifestar la lucha de éste y otros pueblos vecinos contra la explotación de recursos naturales a través de la minería.
La empresa Alamos Gold pretende llevarse oro, plata, arsénico y antimonio del ejido de Coatetelco, que logró obtener un amparo contra la operación de la minera, sin embargo la estrategia de la corporación va más allá de lo jurídico, y pretende lograr la aceptación del pueblo con dádivas para las necesidades más sentidas, explicó Roberto Solis Pineda, originario del pueblo de Coatetelco y miembro del Movimiento Morelense en contra de las Concesiones Mineras de Metales.
Explicó que en la iglesia de la comunidad, la minera «ayudó» a la construcción de la capilla abierta cuando el sismo del 19 de septiembre dañó la parroquia.
La lucha de los pueblos no es reciente, recordó que en 2002 el gobierno federal otorgó una concesión por 50 años a la minera canadiense Esperanza Silver para la explotación de diversos recursos naturales, tiempo después, al conocer las afectaciones al territorio, la comunidad empezó una lucha para evitar que la minera continuara las actividades, Esperanza Silver se fue pero llegó Álamos Gold quien absorbió a la empresa presuntamente por más de 60 millones de dólares.
Dentro del ejido de Coatetelco detectaron cuatro metales, oro, plata, antimonio y arsénico; el antimonio sirve para explosivos y otras cosas relativas a la guerra, es mucho más caro que el oro y creemos que después de explotar el cerro del Jumil se van a pasar al ejido de Coatetelco.
El activista relató que a decir de estudiosos en el tema que participan en la lucha del territorio, el antimonio es muy radiactivo y eso representaría una contaminación severa.
En Coatetelco, la principal actividad es la agricultura, la pesca y la actividad turística que se genera en torno a laguna del mismo nombre. Sus pobladores conocen su territorio y temen que ríos y diversos cuerpos de agua sean afectados.
Otro punto que preocupa a los pobladores es la afectación al paraje conocido como «la víbora», a medio río Tembembe que riega mil 700 hectáreas por medio de dos lagunas, Coatetelco y El Rodeo, con lo que afectaría a mil 700 familias, 800 ganaderos y prácticamente de asentarse la minera va a desaparecer la ganadería y la pesca de 70 familias que están organizados en una cooperativa, y con ello la actividad turística, todo esto es una cadena de afectación» comentó Juan Jiménez Escobar, ejidatario de Miacatlán e integrante del Movimiento Morelense en contra de las Concesiones Mineras de Metales.
El también activista adelantó que diversas agrupaciones en todo el país buscan una reunión con el presidente electo, Andrés Manuel López Obrador, para que cancele las concesiones mineras, principalmente las canadienses que imperan en el territorio mexicano.