Redacción SL
Cuernavaca, Mor., 22 de septiembre.- Grupos religiosos que se oponen al aborto anunciaron campañas de oración y ayuno a partir de mañana y hasta el 1 de noviembre, para demostrar su rechazo a la iniciativa de ley que busca legalizar la interrupción del embarazo.
La vocera del movimiento 40 días por la vida, Josefina Martínez, informó que Morelos se sumó a la comunidad de fe que se realiza a nivel nacional porque hace unos días la Comisión de Derechos Humanos de Morelos (CDHM) y el Instituto de la Mujer de Morelos, anunciaron que presentaría una iniciativa de ley para despenalizar el aborto la cual entregarían al Congreso de Morelos para su análisis y en su caso aprobación.
Por lo anterior y al señalar que interrumpir es un término de algo que se puede restablecer y continuar, cuando en realidad lo que se hace es asesinar a un indefenso por no tener voz, abrirán tres campañas de oración que estarán ubicados, uno frente al IMSS de Plan de Ayala, otro en Emiliano Zapata frente al ISSSTE y otro en el crucero de Tejalpa en Jiutepec.
Señaló que esta campaña iniciará este miércoles en un horario de 7:00 a 19:00 horas por 40 días hasta el 1 de noviembre. Además, pedirían a los diputados que la iniciativa no llegue al pleno, ya que en Morelos han aumentado los abortos y a nivel mundial son alrededor de 48 millones de bebés que son abortados por eso la campaña de oración estará presente en 64 países.
Josefina Martínez indicó que en un lapso de 10 años más de 800 mujeres recurrieron a la Ciudad de México para practicarse el aborto, aunque en otros casos el aborto fue en centros clandestinos.
Agregó que de acuerdo con estadísticas oficiales del sector salud de Morelos sobre prácticas abortivas, solo en uno de los cerca de dos mil casos practicados en un periodo de cuatro años, se hablaba de complicaciones médicas o peligro de la madre, y quienes abortaron no eran menores de edad sino en más del 90 por ciento fueron mujeres en edad económicamente activa entre 20 y 32 años.
Con la campaña dijo buscan integrar a la comunidad en oración pacifica para evitar que la cultura de la muerte avance y sobre todo atente contra el derecho a la vida de los más inocentes, de tal manera que también se pretende salvar a las madres de los efectos post-aborto.