Por Leticia Villaseñor
Cuernavaca, Mor., 23 de octubre.- Mujeres con niños y gente de la tercera edad llegaron desde las 6:00 horas a la avenida Domingo Díez, instalaron dos carpas pequeñas blancas sobre el asfalto, frente a la delegación de la Sedatu, y exigieron recursos para vivienda.
Las autoridades afirmaron que no tienen recursos y eso provocó el «plantón» en la Secretaría de Desarrollo Agrario, Territorial y Urbano (Sedatu), y un caos vial en la capital morelense, que de no resolverse será permanente, advirtieron.
La gente que se dio cita fue convocada por la Central Independiente de Obreros Avícolas y Campesinos (Cioac), y del Frente Auténtico del Campo. Genoveva Flores Ramírez, secretaria general de esa organización, explicó la acción se dio de forma simultánea en las oficinas centrales de la dependencia federal, en la Ciudad de México, y en las delegaciones estatales.
La demanda fue la liberación de los recursos en los rubros de vivienda rural y vivienda urbana que no fueron entregados durante el presente año, presuntamente desde el pasado mes de mayo. A decir de la líder campesina, son alrededor de 10 mil afectados en el país y de ellos 250 familias son de Morelos.
Para Sostenes Jiménez, un hombre de unos 60 años de edad oriundo de Alpuyeca, en Xochitepec, la entrega de cemento, block, varilla, entre otros, permitirá a su familia de seis integrantes tener una mejor vida ya que dijo habitan una casa de lámina donde sólo hay una cocina y el espacio apenas suficiente para que duerman.
El monto del recurso prometido a los morelenses es de 6 millones de pesos, 24 mil pesos en materiales para cada familia que solicitó la ayuda y que fueron “palomeados” una vez que acreditaron que se les abrió un expediente en el cual consta que son campesinos de escasos recursos. Los beneficiados son vecinos de las comunidades de Coatetelteco, Alpuyeca, Tepalcino, Jumiltepec, Ayala Miacatlán, Xochicalco, El Rodeo, Cuauchichinola y Coatlán del Río.
Flores Ramírez expuso que la orden de la Central campesina derivó de declaraciones del personal de Sedatu quienes dijeron que no ay recursos para estos rubros. “Por eso decidimos movilizarnos y hacer un bloqueo permanente hasta que los materiales sean liberados”, dijo.
Los recursos deben esparcirse desde la Ciudad de México hacia las delegaciones, por lo que cualquier diálogo con los encarados estatales resulta ocioso, abundó, pero la medida de los bloqueos se tomó para presionar y hacer evidente sus necesidades, argumentó.
Don Sostenes, además de sus necesidades, representó en el bloqueo a otras seis familias. “La gente está desesperada, las autoridades prometen pero no liberan nada, a mí me han amenazado porque corrió el rumor que los recursos los desviaron a los afectados del sismo (del pasado 19 de septiembre) pero no es cuestión personal es de los funcionarios que no cumplen y que no entienden que esto es una guerra”, sentenció sin recelo, a pesar de que el continente plantado en una de las principales conexiones a la ciudad de México fue de mujeres, niños y personas de la tercera edad.
“No importa, estamos habituados, si vienen a desalojarnos nos instalamos de nuevo hasta que el gobierno cumpla”, finalizó.
El bloqueo de una de las principales avenidas, al norte de Cuernavaca, provocó un caos vehicular ante la falta de elementos viales en el crucero de Paseo del Conquistador y Domingo Díez, tres cuadras debajo de las oficinas federales.