Por la Redacción
Cuernavaca, 24 de abril.- Las construcciones arquitectónicas y espacios públicos se construyen en base al miedo y la inseguridad, lo que provoca la fragmentación de la ciudadanía, es el argumento de Alfonso Valenzuela Aguilera en su libro «La construcción espacial del miedo».
Roberto Ochoa Gavaldón, director del Centro de Extensión y las Culturas de la Universidad Autónoma del Estado de Morelos (UAEM) expuso al presentar el libro cómo las ciudades modernas son construidas para instalar el miedo, mediante el urbanismo defensivo, porque hoy lo que más se construye son murallas, fraccionamientos privados y calles cerradas, debido al miedo de los ciudadanos que se ven indefensos ante el Estado y la criminalidad. «Este libro alerta sobre la falta de espacios públicos seguros», puntualizó.
Ariel Ramírez, secretario de investigación de la Facultad de Estudios Superiores de Cuautla de la UAEM, dijo que la obra revela cómo las construcciones contemporáneas están al servicio de las necesidades del capital financiero e inmobiliario y no de la ciudadanía, en donde lo imperante no es la seguridad de las personas, sino de las intereses del capital.
Finalmente, el autor, Alfonso Valenzuela explicó que los efectos de las construcciones cerradas es que las ciudades impiden cada vez más el libre tránsito de las personas y las mercancías, perjudicando la economía y otros ámbitos como las relaciones sociales de convivencia colectiva a causa del miedo.