El Museo de la Ciudad de Cuernavaca (Mucic) fue improvisado para rendir homenaje de cuerpo presente con algunas sillas y una lona grande cuyo rotulo exhibió: «amigo, padre, hermano; ciudadano ejemplar» Juan David Juárez López (1970-2019). El mensaje fue acompañado de un moño negro y varios arreglos florales.
Por la alfombra roja caminó el alcalde Antonio Villalobos Adán, integrantes de su gabinete, regidores, directores y personal del ayuntamiento pero no acudió la síndico municipal Marisol Becerra de la Fuente.
En ese ambiente lúgubre nadie habló sobre los motivos del crimen, todos callaron. El alcalde, su secretario de Gobierno municipal, los regidores y la corporación guardaron un silencio.
Sobre el ataúd de Juan David fue colocada la bandera mexicana y a su alrededor algunas veladoras como la luz que necesitará en su camino al otro mundo.
«Cuando un hombre ha hecho lo que el considera como su deber para con su pueblo y su país, puede descansar en paz», pronunció el vocero de la Secretaría de Seguridad Ciudadana de Cuernavaca, Carlos Félix, y de inmediato el llanto invadió el ambiente.
Las emociones continuaron con el último pase de lista y el toque de silencio en honor al encargado de despacho de la SSC, abatido por dos pistoleros, según reportes preliminares, cuando llegaba a su domicilio en la unidad habitacional Teopanzolco.
Juan David fue designado encargado de despacho el pasado 1 de agosto, en lugar del vicealmirante José Guadalupe Ávila Gil.
Es el segundo de cinco hermanos y es recordado por sus familiares como una buena persona que no tenía enemigos, por eso lo señalaron como el águila que voló y cuidará de los suyos desde el cielo.
Para despedirlo el edil Antonio Villalobos lo nombró Secretario de Seguridad y dijo con voz entrecortada: «Comandante Juan David Juárez López protesta guardar y hacer guardar la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos y las leyes que ella emanen, desempeñar leal y patrioticamente el cargo de Secretario de Seguridad Ciudadana municipal de Cuernavaca que se le ha conferido mirando por el bien de Cuernavaca».
Antes, pidió a los malos trabajar en cosas lícitas, cuidar a las mujeres y niños e integrarse como sociedad porque necesitamos paz.
Alrededor de las 14:30 horas el ataúd con el cuerpo de Juan David, que recibió varios impactos de arma de fuego, fue subido a un camión de bomberos para llevarlo al panteón La Paz al sur de la ciudad, donde será velado y sepultado este sábado al mediodía.