Por Moisés Sánchez

Cuernavaca, Mor., 14 de julio. – La “Pulga” pegó su brinco más alto y en la final del torneo nacional Street Soccer, De la calle a la cancha, Julio Reyes, gambeteó un par de ocasiones y en las dos salió avante. Marcó dos tantos, suficientes para alcanzar un sueño que desde hace un año perseguía: ser seleccionado nacional.

De 18 años, bajito de estatura, hábil con el balón, Reyes vino de Ciudad Juárez, Chihuahua, para coronarse campeón nacional y ser seleccionado junto con dos de sus compañeros para representar a México en el Homeless World Cup 2017, que se efectuará en Noruega el próximo agosto. Las 32 horas de viaje, dice, valieron la pena.

Afónico, de tanto festejar, Julio contó que hace un par de años dejó la escuela, su situación económica era complicada, su madre no podía mantener a su pequeña hermana y a él. Su única alternativa era buscar un trabajo, el que fuera.

Hasta hace un año laboraba en una cancha de futbol de Ciudad Juárez, como árbitro auxiliar, la paga era poca, pero estaba cerca de pasión: el fútbol. Ahí conoció a una persona que lo invitó a ser parte de un equipo local de futbol rápido, al poco tiempo, gracias a su destreza con la bola fue llamado al conjunto estatal.

Del 12 al 14 de julio se llevó a cabo la novena edición del certamen nacional De la calle a la cancha, donde más de 600 jóvenes en situación de vulnerabilidad, aglutinados en 61 equipos de toda la república, justaron por el título. En esta ocasión el torneo fue organizado por la fundación TELMEX TELCEL, el Instituto del Deporte y el DIF Morelos, con la intención de que esos jóvenes superen sus problemas a través de la actividad física y el deporte.

Christian Méndez, entrenador de la selección de Chihuahua, se dijo contento de que tres de sus chicos hayan sido seleccionados y del campeonato que consiguieron. Él, hace un año, se coronó como monarca mundial, jugando como medio centro.

“A los jóvenes que entrené y que ahora viajarán a la copa mundial sólo me queda decirles que siempre recuerden de dónde vienen y nunca dejen de ser buenas personas, porque eso es lo que marca la diferencia. Hoy vamos a festejar y ya mañana veremos qué es lo que sigue”, refirió.