Redacción SL
Cuernavaca, Mor., 29 de septiembre.- Vecinos de la privada Oyamel de la colonia Lomas de Tzompantle denunciaron que el ayuntamiento de Cuernavaca incumplió con el pago a la empresa “Berum”, y esta detuvo los trabajos de pavimentación y drenaje para reparar el socavón que se registró en la calle principal de esta privada, en junio pasado.
De acuerdo con lo expuesto por uno de los vecinos, Leopoldo Daniel Alarcón Romero, el municipio se comprometió a terminar la obra en un lapso de 90 días pero actualmente la construcción lleva un 21 por ciento, por lo que temen que ante la temporada de lluvias se registre mayor número de inundaciones como ocurrió hace unos días.
La privada Oyamel se ubica al norte de la ciudad y durante el sismo de septiembre pasado la tierra se reblandeció, después las lluvias provocaron un hoyo de más de 10 metros el cual no ha sido reparado presuntamente porque el gobierno municipal mantiene un adeudo con la empresa encargada de los trabajos.
Ante esta situación Leopoldo Alarcón convocó a las 25 familias que se ven afectadas para juntar firmar y enviarlas a la Secretaría del ayuntamiento, porque dicen los vecinos que la autoridad municipal no responde a sus demandas “solo les dan largas”.
Los colonos denunciaron que los trabajos están detenidos y los albañiles acuden pero a jugar baraja, dicen que no ven una solución definitiva y aunque contactaron al subsecretario de Obras del ayuntamiento, Abel Márquez Carreto, solo nos dan largas y no atienden a sus demandas.
“El 17 de agosto el arquitecto Gilberto Gálvez le pidió a la empresa que aumente la fuerza de trabajo porque llevaban un avance del 18 por ciento cuando ya debería estar finalizando la obra, entonces el ingeniero Abel confirmó que no le han pagado a la empresa porque el tesorero del ayuntamiento no ha querido hacer los pagos pertinentes, y esto ha detenido todo el proceso”, declaró Leopoldo Alarcón.
Otro de los vecinos, Erick García, denunció que como consecuencia del retraso en la obra de reparación las lluvias de los últimos días dejaron inundaciones en cuatro casas con pérdidas económicas.
“Hemos sufrido robo de llantas de los vehículos, han roto algunos cristales, se han robado las pertenencias de los vecinos. Si vemos la calle parece una privada fantasma no vienen servicios municipales, los drenajes no están funcionando, eso también afecta a las viviendas, los niños no pueden ni salir por la cuestión del riesgo que hay en la bajada hacia la privada, está próxima a caerse”, denunció Erick García.