La mayoría de las veces pensamos que las cicatrices son feas, y si nosotros tenemos alguna, nos causan cierta “vergüenza”. Es por eso que ocultarlas se ha convertido en una práctica habitual, porque realmente hay gente que se siente insegura sobre ellas.
Sin embargo, hay una fotógrafa británica que trabaja para cambiar esta percepción. Se trata de Sophie Mayanne, quien inició un proyecto llamado “Behind the scars” (Detrás de las cicatrices), que está conformado por conmovedoras imágenes de gente que presume sus cicatrices y que nos cuentan la historia que hay detrás de ellas.
De acuerdo con Gonzoo, las fotos de Sophie no tienen ningún tipo de retoque porque ella se comprometió a no manipular digitalmente los cuerpos o la piel de sus modelos.
En entrevista con Bored Panda, señaló que “como fotógrafa siempre me he sentido atraída por el trabajo bruto y sin retocar, así como aquello que nos hace diferentes entre nosotros, y es aquí donde surge mi interés por las cicatrices”.
Estas son algunas de las historias que Sophie Mayanne ha contado con sus fotografías…
1. Maya. Desde los 18 meses de edad fue diagnisticada con epidermolisis bullosa.
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6. Tracey. Todo comenzó como un simple resfriado, pero le diagnosticaron dos tipos de meningitis. Le retiraron un tumor en una válvula del corazón y le hicieron una traqueotomía.
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8. Barbara. En 2014 fue diagnostcada con angiosarcoma de pecho, un cáncer bastante agresivo. En sus cirugías le retiraron el esternón y cuatro costillas.
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9. Jamie. Nació a las 24 semanas de gestación y pesó 500 gramos. Llevó una bolsa de ileostomía para recolectar su materia fecal, ya que sus intestinos no funcionaban correctamente.
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10. Yasmine. Un tumor le cambió la vida. Estaba pegado al hígado, a varios nervios y a una arteria de la pierna. Ésta fue la cicatriz que le dejó su extracción.