Por: Uzziel Becerra
Sin duda la corrupción es uno de los mayores problemas del país pero debe decirse que ésta también se hereda y se comparte sexenio tras sexenio, de gobierno a gobierno, acompañada de impunidad y solapamiento. El inobjetable triunfo de Andrés Manuel López Obrador antes de concluir el conteo de votos de los comicios en julio del año pasado permitieron que, como es tradición en la más alta esfera política del país, el presidente saliente pactara con su sucesor con la finalidad de facilitar la asunción al poder de uno y proteger los excesos, desvíos e incluso los delitos en los que se hubiere involucrado el otro.
Tres acontecimientos recientes respaldan lo anterior.
Primero: la detención del abogado Juan Collado por su probable responsabilidad en los delitos de delincuencia organizada y operaciones con recursos de procedencia ilícita, abrió debate respecto de la relación que guarda el gobierno de Enrique Peña Nieto y López Obrador. Lo anterior porque, de acuerdo con las investigaciones sobre los delitos por los que se acusa al abogado Juan Collado, la empresa Libertad Servicios Financieros, con que operaba una red de empresas dedicadas a los préstamos prendarios y de ahorro en al menos ocho entidades del país, estaría ligada con los ex presidentes Peña Nieto y Carlos Salinas de Gortari. La Unidad de Inteligencia Financiera de la SHCP junto con la FGR ya congeló al menos ocho cuentas de personas relacionadas con el abogado detenido, así lo dio a conocer su titular, Santiago Nieto pero la investigación no ha tocado a los ex presidentes.
Segundo: se dio a conocer un video de Javier Duarte, ex gobernador de Veracruz, procesado por los delitos de lavado de dinero y asociación delictuosa, en el que minutos antes de su detención confiesa haber realizado un pacto con el gobierno federal, encabezado entonces por Peña Nieto, con el fin de impedir cualquier persecución contra a su familia y aseverando que no se trató de una captura, sino de una entrega. En ese video Duarte también acusa arreglo desde Secretaría de Gobernación y, Osorio Chong, quien fue su titular, hoy se encuentra legislando desde el Senado de la República.
Tercero: recientemente se registró una falla en las válvulas de las tuberías de Grupo México, empresa de Germán Larrea, provocando una fuga de aproximadamente 3 mil litros de ácido sulfúrico, vertidos en el Mar de Cortés. La Procuraduría Federal de Protección al Ambiente realizó el procedimiento de inspección correspondiente para conocer la posible existencia de daños al medio ambiente. El hecho es relevante por los antecedentes de la empresa respecto a afectaciones al medio ambiente y a la población colindante. En mayo de este año, el río de San Martín Sombrerete, en Zacatecas, fue contaminado por un derrame de químicos producidos por una mina de Grupo México. En 2014, la mina Buenavista del Cobre derramó 40 mil metros cúbicos de ácido sulfúrico sobre el Rio Sonora, dejando el agua inservible para el consumo humano y para las actividades productivas que se desarrollaban sobre él, afectando a 25 mil habitantes. La Profepa analiza revocar los permisos de operación de Grupo México pues a lo largo de 20 años se han registrado 22 accidentes ambientales, declaró el titular de la dependencia, Víctor Toledo.
Los tres casos se vinculan en el sentido de que la administración pasada solapó, protegió y dejó en la impunidad los delitos y las afectaciones a la población; los mismos hechos siguen teniendo repercusiones hoy, en la administración de la “4T” encabezada por López Obrador. Lo que algunos analistas describieron como un pacto de impunidad anticipada entre López y Peña está a prueba, respecto del alcance que tengan las investigaciones realizadas por la Fiscalía General de la República y las sanciones contra los grupos empresariales y las redes de poder vinculadas, aunado a los casos pendientes como el de Odebrecht en el que la prensa internacional señaló implicado al entonces presidente Peña Nieto. Solo así se podrá observar el compromiso de esta administración con el combate a la corrupción y la impunidad.