Foto: Máximo Cerdio

Por Leticia Villaseñor

Cuernavaca, Mor., 29 de diciembre.- Neyda Lucía Salas Díaz de 23 años salió de su casa hacia la ciudad de Cuautla a finales de febrero de 2016 para acudir a una cita de trabajo. La familia perdió contacto con ella e inició una denuncia por desaparición.

Por casi dos años se desconoció el paradero de la joven hasta un par de días atrás en que la familia fue notificada sobre una coincidencia de un cuerpo en el Servicio Médico Forense (Semefo) de la Fiscalía Regional Oriente ubicado en Cuautla.

Neyda Lucía fue asesinada y sus restos inhumados de forma clandestina en un domicilio en el poblado de San Miguel Apatlaco en el municipio de Ayala.

Sobre el caso, la Fiscalía informó que derivado de las investigaciones tras la denuncia se ubicó dicha casa y ahí el cuerpo de una mujer.

A decir de Lizbeth Cerón, integrante de la organización Víctimas de Ofendidos del Estado de Morelos, AC, fueron los canes adiestrados los que detectaron los restos enterrados en el lugar. También detalló que dicho cateo se realizó en junio del año pasado.

A la Fiscalía le tomó año y medio realizar la confronta de los restos encontrados en el domicilio de Ayala, con las muestras de la familia Salas Díaz.

El caso de Neyda es el segundo que ocurre en el año, el primero fue el del expolicía Jesús Hernández Maldonado, reportado como desaparecido desde el 25 de marzo de 2014 y cuyo cuerpo fue localizado en junio de ese mismo año pero fue hasta septiembre de este año que se realizó la confronta y salió positiva.

Teresa Ulloa Ziáurriz, directora de la Coalición Regional contra el Tráfico de Mujeres y Niñas en América y el Caribe, (Catwlac por sus siglas en inglés) exigió al fiscal Javier Pérez Durón inhabilite y sancione de inmediato a los funcionarios responsables implicados en ambos casos.