De la redacción
Cuernavaca, Mor., 29 de agosto.- Ni la Universidad del Estado ni el estado de Morelos merecen estar sujetos a los enfrentamientos personales entre el rector y el gobernador, por lo que lo preferible es que, en un acto de responsabilidad política, ambos sujeten su permanencia en el cargo a lo que la comunidad universitaria y los morelenses, respectivamente, decidan, a través de un plebiscito.
Así lo consideró el diputado federal del PRI, Matías Nazario Morales, luego de reprobar y calificar como represivo el desalojo ordenado por el gobierno estatal contra el campamento del FAM. Afirmó que si la salida del gobernador del estado y del rector de la UAEM son el camino para alcanzar la paz y la tranquilidad social, que ésta se decida a través de un plebiscito con el pueblo de Morelos y con la comunidad universitaria para que la soberanía popular sea la que decida.
«Repruebo terminantemente que se use la fuerza pública como medio de dirimir los conflictos sociales que aquejan al estado», dijo.
Anunció que solicitará la intervención de la Comisión de Derechos Humanos de la Cámara de Diputados para que investigue el desalojo de quienes ejercían su derecho a manifestarse de forma pacífica. «Exijo que la Comisión Estatal de los Derechos Humanos haga lo propio” enfatizó el legislador.
En su opinión el nivel de confrontación entre el rector de la Universidad Autónoma del Estado de Morelos y el gobernador, Graco Ramírez afecta el sano funcionamiento de las instituciones y pone en riesgo la estabilidad política y social de Morelos. No es posible que la gobernabilidad del estado esté sujeto al protagonismo de los actores políticos, sostuvo.