Familiares exigen justicia y denuncian que no hay avances en la carpeta de investigación.
Por Antonella Ladino
Dulce Gabriela salió de su casa porque le habrían avisado que los asesinos de su hijo Fernando estaban en libertad, aunque después los familiares corroboraron que era falso, dijo su madre, Yolanda González Guerrero.
En la estatua de la justicia en el Poder Judicial de Morelos, familiares de Dulce y mujeres víctimas de violencia vicaria, colocaron un moño negro para exigir justicia por el feminicidio y el asesinato de Fernando, hijo menor de Dulce.
Yolanda, acusó que a su hija la mató el estado, porque a pesar de que tenía la guardia y custodia de los menores, el juez Gabriel Miranda Flores le otorgó la custodia al padre que vivía con su nueva pareja en Celaya, Guanajuato.
Aunque Dulce denunció la sustracción de los niños en la Fiscalía de Guanajuato, se negaron a levantar la denuncia, afirmó la mamá y agregó que en mayo de este año se enteraron de la muerte de Fernando, quien habría perdido la vida a causa de los golpes que recibió días antes por su padre.
Dulce Gabriela exigía justicia justicia para su hijo y, de acuerdo con su madre, después de que desapareció los familiares recibieron mensajes de texto que presuntamente envió ella en el que decía que si le algo le pasaba le prendieran una veladora a su hijo el día de su cumpleaños, el Día de Muertos y el día que falleció.
El 26 de julio apareció el cuerpo sin vida de Gabriela, pero no hay avances en la investigación y la Fiscalía General del Estado (FGE) ha informado a los familiares que es competencia de la Fiscalía del Estado de México porque allá ocurrieron los hechos.
