Debido a la suspensión de energía en los pozos, la población ha bloqueado distintos puntos de la capital para exigir la reconexión.
Redacción SL
La crisis económica que vive el Sistema de Agua Potable y Alcantarillado de Cuernavaca (SAPAC) no sólo afecta al personal del organismo, sino que ha impactado negativamente en el servicio a favor de la ciudadanía.
Como ya se ha dado a conocer, la deuda histórica que tiene el SAPAC con la Comisión Federal de Electricidad (CFE) supera los 300 millones de pesos.
Si bien dicha deuda no fue adquirida en el actual trienio, la administración municipal en curso ha incumplido con los acuerdos para cubrir los pagos requeridos por la CFE.
En este sentido, la Comisión y el Sistema acordaron plazos para poder ir liquidando el adeudo. Sin embargo, la falta de cumplimiento ha provocado que la paraestatal suspenda el suministro de energía eléctrica en varios pozos de distribución, lo que deriva en la falta de agua y la molestia de la ciudadanía, que pasa más tiempo sin servicio.
Hay que recordar que hace unos días, el SAPAC debía cubrir un pago de nueve millones de pesos, pero únicamente cubrió una parte. Por ello solicitó una prórroga, pero tampoco cumplió al vencerse el plazo.
Respecto de esta situación, el alcalde de Cuernavaca, José Luis Urióstegui Salgado, ha dado a conocer que el SAPAC y la CFE sostienen reuniones para abordar dicha problemática.
Aunado a lo anterior, el edil recordó que el pago de aguinaldos del personal del organismo afectó las finanzas, de ahí que este inicio de año ha sido frecuente la suspensión del servicio de energía eléctrica en las bombas y, por consiguiente, la falta de dotación para las colonias y poblados.
Todo ello ha generado malestar y cansancio entre la población, que desde hace varios días ha decidido bloquear distintos puntos del municipio para exigir el servicio.