Sostiene que los golpes no eran motivo para que los menores huyeran de su casa.
Redacción SL
Imelda de la Rosa Alejandro, mamá de los menores Angelo y Selena, desaparecidos desde hace un mes en Yautepec, admitió que el papá sí agredía físicamente a sus hijos cuando no se portaban bien, pero aseguró que ese no es motivo para que escaparan de su casa y sostuvo que fueron sustraídos a causa de una venganza.
«Sí los regañaba pero normal, les daba un golpe normal con la mano como cuando alguien hace algo que no está bien. Sí me decía ‘tu hijo hizo esto’ y por eso les pegaba, pero no como para dejarlos marcados porque la Fiscalía me preguntó si les pegaba con lazos o algo así y les pegaba con la mano cuando no hacían algo bien», señaló la madre de los menores.
En la explanada del zócalo de Cuernavaca solicitaron la intervención del gobernador Cuauhtémoc Blanco Bravo para reanudar los trabajos de búsqueda en esa localidad.

Dijo que a casi un mes de su desaparición no hay resultados y la Fiscalía General del Estado (FGE) no ha interrogado a los familiares ni al vecino de nombre Miguel como uno de los presuntos responsables.