Redacción SL
Cuernavaca, Mor., 7 de mayo.- El gobierno de Morelos confirmó la muerte del pintor zacatecano Rafael Coronel Arroyo, quien los últimos 25 años radicó en Cuernavaca. Su hijo Juan Rafael Coronel informó a través de sus cuentas de redes sociales que el fallecimiento de su padre ocurrió en la Ciudad de México. En Morelos el Centro Cultural Jardín Borda cuenta con una de sus obras llamada «El Moro», como parte de su acervo cultural.
Esta es su semblanza.
Artista plástico y pintor mexicano cuya obra ha sido exhibida y reconocida internacionalmente.
Un museo en la ciudad de Zacatecas, de donde Coronel es originario, lleva su nombre y en este, se exhibe una gran colección de máscaras pertenecientes al artista así como varios objetos coloniales como dibujos, ollas, terracotas y muebles.
Nacido en 1931, Rafael Coronel mostró inclinaciones artísticas desde muy joven. Su abuelo se dedicó a decorar iglesias, es hermano menor del artista Pedro Coronel y yerno de Diego Rivera.
En 1952, ganó un concurso de pintura que le otorgó una beca para estudiar en la Escuela Nacional de Artes Plásticas La Esmeralda en la Ciudad de México, de donde fue expulsado dos meses después por no seguir las instrucciones de sus maestros.
Más tarde, Coronel conoció a Inés Amor, quien era dueña de la Galería Arte Mexicano y manejaba a Diego Rivera, Gunther Gerszo y Rufino Tamayo. Desde entonces su carrera despegó y ocasionó controversia.
Hizo estudios en la Escuela Nacional de Arquitectura y luego pasó a la Academia de High American School. A partir de 1956 ha presentado exposiciones de su obra en México, Estados Unidos, Japón, Puerto Rico y Brasil.
Ha obtenido el Premio Córdoba en Sao Paulo, Brasil, (1965) y el Primer Premio en la Bienal de Tokio,
Japón (1975).
La obra de Coronel ha sido descrita como “expresionismo realista que representa figuras temibles con toques de las más bajas experiencias urbanas“, su pintura es frecuentemente comparada con grandes artistas como Goya y José Clemente Orozco.
La temática de su trabajo a menudo provoca discusión a qué corriente artística pertenece, al Neo-Romanticismo o al Mexicanismo contemporáneo, ya que contiene características de ambas.
En 2011, se realizaron múltiples eventos para celebrar el 80 aniversario del artista. En el Festival Cultural Zacatecas XXV, se llevó a cabo un homenaje en el que por medio de diversas disciplinas, como la pintura, la danza, el teatro y la música se conmemoraron las diferentes etapas de su obra.
En el terreno de la amistad, Coronel es calificado como un hombre generoso. Así lo indica la escritora Beatriz Espejo, con quien ha mantenido una estrecha amistad. «Nos conocimos muy jóvenes y lo admiraba muchísimo. Era un hombre muy guapo y atractivo, de pocas palabras, pero concisas y llenas de afecto. La generosidad era una de sus cualidades y tenía muchas obsesiones; una de ellas es la de coleccionar máscaras», explicó en entrevista.
Sus amigos son pocos, entre ellos se cuentan Arnaldo Cohen, Paulina Lavista y Alejandro Jodorowski, con quienes en los años 60 hacía, declaró alguna vez, «borracheras de dos o tres días».
Considerado como uno de los representantes más definidos del nuevo expresionismo mexicano, ha incursionado en diversos movimientos como “la ruptura” y el hiperrealismo.
Con una visión fotográfica, Coronel acoge a los personajes cotidianos: una prostituta, un teporocho o personajes de sociedad inmersos en la decadencia. Su objetivo: retratar la sociedad contemporánea.
Una de las cosas interesantes en su plástica es que quizá es el primer pintor dentro del arte contemporáneo que utiliza a la rata como un signo de lo que está sucediendo dentro de la psicología del hombre contemporáneo. La rata, si bien está representando a un animal, también simboliza una parte del ser humano. Esa porción que tenemos de roedores, de destructores no nada más hacia la naturaleza sino hacia el mismo ser humano.