Estuvo internado por más de 5 años debido a su enfermedad de diabetes.
La Confederación Internacional de Morelenses y Migrantes Mexicanos, lamenta el sensible fallecimiento del paisano Morelense Rodrigo Ruiz Pinzón.
Rodrigo falleció el pasado martes 27 en el Centro de Rehabilitación College Park ubicado en Las Vegas, lugar donde estuvo internado por más de 5 años debido a su enfermedad de diabetes y a la pérdida total de su vista en ambos ojos.
Su problema de salud se agravó después que tuvieron que amputarle dos dedos de su pie derecho por las picaduras que sufrió de una araña Viuda Negra.
La causa de su fallecimiento no ha sido determinada aún. Ruiz Pinzón emigró a Estados Unidos en 1985 , con el firme propósito y deseo de sacar a su familia adelante.
El connacional se estableció en Los Ángeles y posteriormente se mudó a Las Vegas hace más de dos décadas. Originario de Anenecuilco, Morelos , Rodrigo trabajó durante su juventud en las labores del campo sembrando calabaza, jitomate, pepino,elote y ejote entre otras verduras.
Su papá fue el talentoso músico Casimiro Ruiz Martínez , integrante de la popular Banda La Burra de Ciudad Ayala , donde tocaba el trombón para sostener a su esposa e hijos.
Ruiz Pinzón estudió la primaria en la escuela General Emiliano Zapata del poblado de Anenecuilco; en Villa de Ayala estudió la secundaria en la escuela Tierra y Libertad.
Pablo Antonio Castro Zavala, Presidente de la Confederación Internacional de Morelenses y Migrantes Mexicanos, visitó en varias ocasiones a Ruiz Pinzón en en el lugar donde estuvo internado, e incluso ocasionalmente lo llevaban a eventos culturales con la comunidad Morelense.
“Ya estamos en contacto con su hermano Francisco y familiares en Anenecuilco, para brindarles apoyo en los trámites de la repatriación a su querido pueblo del estado de Morelos, vamos a extrañar mucho a nuestro amigo Rodrigo Ruiz Pinzón, que siempre fue una persona muy entusiasta a pesar de su problema de salud, el día de Halloween fuimos a visitarlo y nos contó varias anécdotas en su diario vivir, sin faltar sus clásicas bromas” dijo Castro Zavala.