Por Leticia Villaseñor
Cuernavaca, Mor., 8 de mayo.- La confrontación entre líderes de comerciantes ambulantes del centro de Cuernavaca es el presunto origen del ataque a balazos, perpetrado este día en el centro de la ciudad de Cuernavaca, que cobró la vida de dos integrantes de la Confederación de Trabajadores de México (CTM-Morelos), Roberto Castrejón Jr. y Jesús García.
A través de un video colgado en la red social de Facebook, Roberto Castrejón Campos, padre de una de las víctimas, acusó que el origen del ataque armado fue obra del “bando contrario” a la CTM, Bulmaro y Ben-Hur Hernández, quienes integran la Federación Nuevo Grupo Sindical (FNGS). “Desgraciadamente pues esto no es más que obra de ellos, yo no culpo al gobierno del estado, no es culpa de la delincuencia organizada, ellos recurrieron a la delincuencia organizada para perpetrar el ataque”, expuso a través de su cuenta de Facebook.
Desde el año 2015 la disputa por el control del comercio ambulante en el zócalo capitalino se acrecentó entre los integrantes de la Federación Nuevo Grupo Sindical (FNGS) y la Confederación de Trabajadores de México (CTM-Morelos).
En febrero de ese año las obras de remodelación del centro histórico emprendidas por la administración de Graco Ramírez provocaron la inconformidad de comercios establecidos, quienes sacaron sus mercancías a la vía pública lo que causó roces con los comerciantes ambulantes.
Entonces la administración perredista gubernamental mandó a elementos policiacos a dispersar las agresiones, además de la confronta de comerciantes con los trabajadores de maquinaria pesada, a quienes impidieron el paso para romper el pavimento y seguir con las obras de remodelación.
Por espacio de año y medio, la tensión se acumuló hasta que el año pasado, en un acuerdo entre organizaciones gremiales, el sector privado y los gobiernos de Cuernavaca y del Gobierno del Estado sentaron las bases para dar inicio a la reubicación del comercio informal en el centro de Cuernavaca.
A convocatoria de la Cámara Nacional de Comercio (Canaco-Cuernavaca) y el Consejo Coordinador Empresarial (CCE-Morelos), los representantes del sector comercio de la FNGS) y la CTM-Morelos se reunieron con representantes del Gobierno del Estado y municipales, para sentar las bases de un proceso de reubicación del ambulantaje, un tema primordial para la ciudad y los ciudadanos.
Según se acordó, las organizaciones gremiales que encabezan Ben-Hur Hernández Bringas y Roberto Castrejón presentarán sus padrones de agremiados a fin de evaluar la permanencia de ellos en las calles o su reubicación. “Les daremos nuestros padrones a los empresarios, en una muestra de fe, para que ellos decidan junto con la autoridad estatal y municipal quiénes tienen derecho a permanecer en el sitio”, dijo Hernández Bringas.
Roberto Castrejón, secretario general de la sección Comercio de la CTM, confirmó la adhesión gremial al proyecto de rescate de la capital morelense y propuso que esta reubicación se dé a las Plazas Lido, La Fayuca y Degollado, ubicadas en las inmediaciones de la Plaza de armas, en el centro histórico de Cuernavaca.
En diciembre pasado el secretario del Ayuntamiento de Cuernavaca, Erick Santiago Romero Benítez, advirtió que no se permitiría la instalación del comercio informal el cual, dijo, incrementó hasta en un 60 por ciento en las últimas dos administraciones.
Señaló que el ayuntamiento tiene un reporte de 150 comerciantes con permisos y los demás trabajan bajo figura de “tolerados”, que han determinado los líderes porque no es una figura que exista en la normatividad, por eso todos tendrán su derecho de audiencia porque hacen el esfuerzo para llevar a cabo el dinero a su casa.
Algunos fueron ubicados en el Callejón del Cubo y hasta ahora buscan espacios para los que están adheridos a sindicatos.
Las pasadas dos semanas se realizaron diversos encuentros entre la autoridad gubernamental y los liderazgos del centro histórico, a fin de lograr su reubicación.
Esta mañana el gobierno del estado tenía programada una reunión con los sindicatos de manera privada, lo que originó una protesta por parte de comerciantes ambulantes que no están agremiados en alguna organización.
La reunión fue suspendida debido a las denuncias de presuntos actos discriminatorios, por lo que el secretario de Desarrollo Social, Gilberto Alcalá, se entrevistó con los inconformes para pactar un nuevo encuentro en el que ya estarían considerados.
En plena entrevista, dos sujetos dispararon contra Jesús García y los hijos de Roberto Castrejón, además de que en el fuego cruzado resultó herido un camarógrafo.
Las autoridades confirmaron el deceso de ambos empresarios, los cuales salían de una reunión que sostuvieron con autoridades estatales en Casa Morelos, sede del gobierno estatal.
La primera víctima fue Jesús García, padre del empresario Jesús García Bejarano, también asesinado en una cabalgata en el marco de la inauguración de la Feria de Cuernavaca en 2017.
Asimismo, Roberto Castrejón, líder comerciante de la CTM, y su hermano quien al igual que el camarógrafo, se reportan estables.
Tras los hechos hubo un detenido identificado como Maximiliano “N” quien dijo ser vecino de la colonia Carolina en Cuernavaca.
En diciembre de 2015 los Castrejón y los Hernández tuvieron diferencias por el tema del reordenamiento de los ambulantes en Cuernavaca, donde salieron a relucir las armas, pero en aquella ocasión la actitud violenta no derivó en detonaciones.