Por Antonella Ladino

El obispo de Chilpancingo, Guerrero, Salvador Rangel Mendoza, quien fue reportado como desaparecido la tarde del lunes, no fue víctima de un secuestro exprés, afirmó el comisionado estatal de Seguridad, José Antonio Ortiz Guarneros.

Aseguró que hay evidencias que fueron entregadas a la Fiscalía General del Estado (FGE), con las que se demuestran que no fue secuestro exprés, ya que se observa entrar de manera voluntaria a un motel con una persona del mismo sexo.

Su acompañante se retiró solo del lugar, agregó Ortiz Guarneros.

El lunes el fiscal general, Uriel Carmona Gándara, informó que una línea de investigación es el secuestro exprés porque retiraron dinero en efectivo en dos ocasiones.

Sin embargo, el secretario de gobierno en funciones de gobernador, Samuel Sotelo Salgado, dijo que el obispo se reunió con un empleado de una pizzería en Emiliano Zapata y después desapareció, hasta que la tarde del lunes fue encontrado con vida en el hospital Parres de Cuernavaca.