Redacción SL
Patricia Torres Rosales, regidora con licencia del Ayuntamiento de Cuernavaca, informó que inició un juicio por violencia política en contra de su homólogo panista, Fernando Carrillo a quien acusó de ser el culpable de que no se le otorgara licencia con goce de sueldo en junio pasado tras la caída que sufrió en el puente colgante del Paseo Ribereño.

En rueda de prensa anunció que en próximos días regresará al cargo que dejó hace cinco meses para atender temas de salud, luego de que el día del accidente un hueso del pie quedó expuesto.

La regidora de Morena dijo que a consecuencia del desplome del puente sufrió lesiones y posteriormente una infección que puso en riesgo su vida, por lo que lamentó que el Ayuntamiento se deslindó de los gastos del hospital.

Ante esa situación, señaló, fue atendida en un hospital particular al enterarse de que el Ayuntamiento la dio de baja en el ISSSTE.

Aclaró que el reclamo no es contra el presidente municipal, José Luis Urióstegui Salgado sino contra los regidores que difundieron información personal sobre su condición de salud y difundieron el oficio de solicitud de licencia con goce de sueldo.