Por Antonella Ladino

Cuernavaca, Mor., 12 de febrero.- El Sistema de Agua Potable y Alcantarillado de Cuernavaca (Sapac) demandó a Petróleos Mexicanos (Pemex) la reubicación de sus  ductos porque con el robo de combustible y las fugas de mismo ponen en riesgo la salud de los habitantes al contaminar  los pozos de agua potable.

Desde el mes de enero, el director del Organismo descentralizado, José Pérez Torres envió un documento al director general de Pemex, Carlos Treviño, en el que argumenta que la falta de vigilancia en los ductos motiva el robo de combustible mediante tomas clandestinas, en la mayoría, con fugas que han llegado a contaminar los pozos de donde se abastece a 40 mil usuarios.

A la solicitud de reubicación también acompañó una denuncia ante la Procuraduría General de la República (PGR) contra quien resulte responsable, por la contaminación de los pozos de agua, al norte de la ciudad.

Hasta el 23 de enero pasado Pemex contabilizó 78 tomas clandestinas de hidrocarburo en Cuernavaca, Huitzilac y Tres Marías, con un promedio de 7 actos de robo de combustible por día. En 2017 cerraron con un promedio de 478 tomas clandestinas de gasolina en Morelos.

Para el responsable del Sapac el robo de combustible y las fugas se han convertido en un problema de salud pública que se niegan a atender las autoridades estatales y federales en materia de medio ambiente. Para ilustrar asegura que el hidrocarburo  ha penetrado hasta 160 metros de profundidad el subsuelo y contaminado el agua en su estado originar.

El riesgo, dice, es que una fuga mayor contamine los afluentes  no solo de la zona norte sino llegar hasta el manantial de la zona protegida del Parque de Chapultepec, y con ello poner en riesgo la salud de más habitantes de la ciudad.

Aunque no cuentan con un diagnostico técnico del problema que origina la contaminación en el agua, José Pérez Torres, asegura que el principal problema es que no existe seguridad pública que evite el robo de combustible, de ahí que su propuesta es o el gobierno del estado brinda mayor seguridad o Pemex tiene que reubicar  las red de 7 kilómetros de ductos.

Las colonias más afectadas por la falta del suministro de agua –por el robo de combustible- están situadas al norte de la ciudad, sobre las calles de Paseo del Conquistador y Gobernadores así como Lomas de Cortés, Maravillas y Ocotepec, las cuales se suministran con los pozos Noria 1 y 2 y Ocotepec Dos.

Noria 1 y 2 se ubican a unos 200 metros de los ductos de Pemex que atraviesan por la calle Tlacopan del poblado de Ocotepec. El pozo Ocotepec Dos se localiza sobre la calle Vicente Guerrero del barrio Los Ramos.

Los pozos Ocotepec Dos y las Norias no presentan olor ni sabor diferente, sin embargo no pueden restablecer el suministro hasta tener el resultado de los análisis de cromatografía de gases.

De acuerdo al director del Sapac, Pemex  evade su responsabilidad en los trabajos de limpieza y remediación de los pozos, que hasta la fecha se mantienen fuera de servicio, lo que afecta la distribución del servicio y cuesta 10 millones de pesos de presupuesto que no se tiene para destinarlo al pago de estudios, químicos para la remediación y pago de pepas para distribuir agua a las colonias cuyos pozos están contaminados.