Madres de desaparecidos visibilizan el problema creciente.

Redacción SL

En el marco del Día de las Madres, mujeres que integran colectivos de búsqueda de personas desaparecidas realizaron un performance en el zócalo de Cuernavaca, porque dijeron que este día no tienen nada que celebrar.

Irma Campos, una de las representantes del colectivo, dijo que este día no es de fiesta y se tiene que visibilizar el problema de personas desaparecidas que va en aumento en el país y en el estado.

Angélica Rodríguez, vocera del colectivo “Regresando a Casa Morelos” afirmó que este día es para recordar al gobierno que tiene una deuda con las madres. “No queremos dejar de recordar a la sociedad que nos hacen falta nuestros hijos”, expresó y denunció que en Cuautla va en aumento las desapariciones.

Desde la ofrenda de las víctimas, cuestionó la labor que realiza la Fiscalía General del Estado (FGE) y señaló que se necesita más personal capacitado así como policías de investigación.

En este mismo marco, Alma Grisela Nieto, madre de Diego Armando, un joven que desapareció hace casi doce años al salir de su trabajo, exigió la renuncia del fiscal general, Uriel Carmona Gándara, porque sostuvo que no hay resultados.

“Se burlan del dolor de una madre y no se vale”, dijo Alma Grisela.

Por su parte los integrantes de los colectivos de violencia vicaria invitaron a participar a una jornada de meditación por la justicia y la paz que se llevará a cabo este jueves a las 8:00 horas en la explanada del Tribunal Superior de Justicia (TSJ).

Gabriela Enríquez Guerra, explicó que se trata de una manifestación de amor para poder estar con sus hijos, aunque sea de manera energética.

Agregó que en Morelos hay por lo menos 50 casos de violencia vicaria, pero diariamente reciben entre seis y siete casos más.

“No podemos asistir a los festivales y celebrar el Día de la Madre porque no estamos con ellos, nos los han quitado por medio de violencia, impunidad y por la violencia institucional”.

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