Leticia Villaseñor

Cuernavaca, Mor., 18 de julio.- Cientos de sindicalizados de los Poderes Ejecutivo, Legislativo, Judicial, así como del ayuntamiento de Cuernavaca y transportistas mantienen un plantón en las inmediaciones del Congreso local en repudio de la reforma integral de la Ley del Instituto de crédito, así como la aprobación del proyecto del Morebus.

El líder de la Federación Auténtica del Transporte, Dagoberto Rivera Jaimes, amagó con un plantón permanente en la calle Matamoros, en pleno centro histórico de Cuernavaca hasta que se logre una mesa de diálogo con los representantes del Poder Ejecutivo y Legislativo y se lleguen a acuerdos por el proyecto del Morebus, el cual, dijo, afectará a más de 25 mil concesionarios del Transporte Público.

“Es un capricho de los diputados y del gobernador Graco Ramírez, fuimos traicionados por los legisladores Ricardo Calvo, Edwin Brito, Anacleto Pedraza, Francisco Navarrete, Jaime Álvarez, Francisco Santillán, entre otros, con quienes mantuvimos pláticas para mejorar el servicio y hoy nos dan madruguete con esta aprobación”, acusó.

Denunció que el trazo de las calles, especialmente de Cuernavaca, no reúne las características para implementar el modelo del Morebús, por lo que adelantó que de seguir dicha iniciativa, los transportistas se organizarán y harán bloqueos en la capital además de paros en el servicio en todo el estado.

Rivera Jaimes además acusó, sin mayores argumentos, que el pasado miércoles durante la sesión a puerta cerrada de los legisladores, las aprobaciones de varias reformas se dieron en medio de un desaseo legal. “Era un auténtico tianguis en el que se condicionó la aprobación de ciertas leyes o sus reformas a cambio de otras, así se dio la aprobación para que todos los concesionarios nos demos de alta como personas morales a fin de que paguemos impuestos y demos seguro social a nuestros trabajadores, pero ello conlleva un aumento en la tarifa del servicio, que hasta ahora hemos mantenido por razones políticas”, expuso el líder transportista.

En tanto los sindicalizados de los tres Poderes así como los del ayuntamiento se organizaron para reforzar dicho plantón así como forma de presión para que la reforma a la Ley del Instituto de Crédito “se eche abajo”.

La secretaria general del Sindicato Auténtico de Trabajadores al Servicio del Ayuntamiento de Cuernavaca, Otilia Reyes Soto, declaró que a pesar de dicha modificación no ha sido publicada, tal y como fue presentada por el diputado de Movimiento ciudadano, Jaime Álvarez Cisneros, los trabajadores del ayuntamiento no fueron considerados.

“Esto nos colocaría en la situación de que nos descuenten las cuotas pero no tendremos acceso a los créditos, debido al adeudo que arrastra la comuna con el Instituto, desde la administración de Manuel Martínez Garrigós, al no pagar las cuotas que sí descontó a los trabajadores”, dijo.

A pesar de que los diputados ya gozan de su periodo vacacional, el diputado del Humanista, Jesús Escamilla se “apareció” en la protesta para proponer a los líderes sindicales que exijan el monto de las cuotas, que a su decir oscilan los mil 300 millones de pesos y formen su propia caja de ahorros para que dispongan de ese patrimonio como les convenga.