Por Oswald Alonso

CUERNAVACA, Mor., 11 de agosto.-  Sílbale a tu madre, dice la frase mas destacada de la campaña que difunde el municipio de Yautepec, Morelos,  en un afán de bajar la violencia contra la mujer; Yautepec fue por  varios años recientes, uno de los municipios del país con más violaciones sexuales. A eso agregamos que es uno de los municipios con Alerta de Violencia de Genero (AVG) decretada por la Secretaría de Gobernación (Segob).

Se trata de una campaña desesperada como la que están haciendo en otros municipios con la AVG, al igual que el gobierno del estado, para mostrar a la opinión pública que atienden las recomendaciones de Segob, para intentar engañar que se ocupan del fenómeno de la violencia directa contra las mujeres.

Expresar, “Sílbale a tu madre”, es tanto como decir viola, mata, golpea, ropa, extorsiona o secuestra a tu madre.  ¿Qué culpa tiene la madre de lo que haga o diga el hijo o hija?

¡Qué chingones!, traduciría la gran obra mexicana que le ha faltado ganar un Nobel de literatura, El Chingonario, en sus tres fascículos.

El municipio de Jiutepec hizo lo mismo o algo peor, lanzó un mensaje: “Las estadísticas son graves y tenemos que hacer algo para revertir este problema social que nos afecta a todos… ya iniciamos una campaña intensa de educación y concientización, estamos visitando todas las escuelas y llevando pláticas a todas las comunidades”.

Al mensaje lo acompaña una imagen grotesca, que según los estudiosos que saben del origen de la violencia, en nada contribuye a la educación y concientización, menos, nos aseguran, a la prevención de la violencia.

La imagen no es nueva.  Son tres mujeres jóvenes, todas con golpes visibles en el rostro. Le acompaña un mensaje: “El 60% de las mujeres en Jiutepec sufren de violencia”. Y pide denuncien a un número.

No es necesario ser un erudito en la materia para darse cuenta que la campaña no es para prevenir los delitos, la imagen por si sola lo explica, es para denunciar lo que ya se cometió. ¿dónde está lo preventivo?

Esta campaña nos dice muchas cosas, pero lo fundamental que los responsables de las áreas de prevención del delito en el Gobierno del Estado y los 33 municipios, son verdaderos ejemplos de ignorancia e improvisación. Ni que decir de los que desarrollan estas campañas publicitarias.

El gobierno del estado repitió la misma  “chingadera” ( termino utilizado por la sabiduría mexicana cuando algo no se hace bien). Es inigualable la forma de cómo tropiezan con la comunicación errónea en el tema de la AVG.

La campaña difunde mensajes como éste: ”Hombres y mujeres estamos orgullosos de tener las mismas oportunidades. Alerta de Violencia de Género Contra las Mujeres». Después, en un cartel aparecen dos hombres sosteniendo un diálogo: «¿Tú cuidando niños?, pregunta un hombre maduro con saco. «Sí, estoy disfrutando de mi hijo porque María fue a tomar café con sus amigas», responde quien lleva su bebé en el pecho.

Otro cartel visualiza a un hombre planchando y diciendo: “Yo también colaboro en las tareas de la casa”.

Abajo dice: «Hombres y mujeres estamos orgullosos de tener las mismas oportunidades. Alerta de Violencia de Género contra las Mujeres».

Así las estrategias para bajar la violencia contra las mujeres.