Por Leticia Villaseñor

Cuernavaca, Mor., 23 de octubre.- Los damnificados por el sismo del pasado 19 de septiembre albergados en escuelas, deberán ser reubicados debido a que los padres de familia demandaron la apertura de los planteles y en un lapso de un mes deberán cerrarse.

El secretario de gobierno, Matías Quiroz Medina, declaró que los días inmediatos al desastre natural se abrieron 60 albergues, varios de ellos en planteles educativos incluso si éstos fueron afectados, como el caso de la secundaria número 2 de AltaVista, en Cuernavaca.

En este plantel se registraron confrontaciones verbales entre damnificados y padres de familia que exigieron la liberación de las instalaciones para que los adolescentes regresen a tomar clases, a pesar de que el inmueble sufrió daños.

Pero también se abrieron refugios en campos y unidades deportivas, explanadas municipales o, como en el caso de la colonia Emiliano Zapata del municipio de Jojutla, la llamada zona cero por el sitio de mayor daño, se colocaron casas de campaña en los terrenos, cuando las construcciones fueron derribadas y el escombro removido.

La Segob y la Secretaría de Relaciones Exteriores gestionaron con el gobierno de China la donación de casas de campaña que se instalaron en las colonias más devastadas y unidades deportivas.

Ayuda similar se recibió del Comité de Ayuda a Desastres y Emergencias Nacionales  (Cadena) una asociación civil sin fines de lucro, de origen judío, dedicada a la prevención y asistencia en emergencias y desastres naturales.

Las donaciones de civiles y empresas, como herramientas, camastros y colcas entre diversos artículos fueron controlados por el gobierno del estado para su distribución. Estas acciones marcaron la diferencia en la afluencia de los albergues por lo que cerca de la mitad de ellos cerraron.

Quiroz Medina adelantó que en un lapso de un mes se desactivarán algunos refugios, sin determinar los criterios, “es un proceso lento porque algunos refugios están bajo el mando de la Secretaría de la Defensa Nacional (como el de la Unidad Deportiva La Perseverancia en Jojutla), de la Secretaría de Gobernación (Unidad Niños Héroes en el mismo municipio) y la mayoría, entre 25 ó 30, están bajo el resguardo de los alcaldes”, detalló.

 

Los padres de familia declararon que lamentan la situación de los damnificados pero urgieron a las autoridades a su reubicación a fin de que dichas acciones no afecten más el ciclo escolar, interrumpido por los efectos del terremoto.

En Jojutla, el jardín de niños “Fermina Rivera viuda de Rivera” no sufrió daños severos pero es el único de los cinco albergues de dico municipio al que llega ayuda del gobierno del estado (es manejado por la diputada perredista Hortencia Figueroa), admitió el responsables de los refugios en la zona, Roque Gónzalez, por lo que está a tope. Hasta el momento, los menores no han regresado a clases.