Foto: Tony Rivera/CiudadanosMx

Por Justino Miranda

CUAUTLA, Mor.- De los ocho veneros afectados por el sismo del pasado 19 de septiembre cinco siguen en estudio por especialistas, dos están en recuperación paulatina y uno de ellos, San Ramón, no registra signos de recuperación ante las acciones de mitigación, informó Juan Carlos Valencia Vargas, secretario ejecutivo de la Comisión Estatal del Agua (Ceagua).

Entre ese conjunto de manantiales hay tres que perdieron su caudal por el movimiento telúrico, fueron los más afectados; Agua Hedionda en Cuautla, Palo Bolero y San Ramón del municipio de Xochitepec. El primer reporte oficial, luego del sismo, dio cuenta de daños en 15 de los 46 balnearios del estado, y de esa cifra hay ocho centros acuáticos cuyo abastecimiento es con veneros. El más dañado fue Agua Hedionda.

Es un balneario de aguas sulfurosas que se localiza en el oriente del estado y su origen se remonta a 1928 cuando comenzó a operar como poza. Al año siguiente inició su construcción como balneario rústico y en 1943 el arquitecto Hannes Meyer, de origen suizo, planeó la construcción moderna.

El temblor de 7.1 grados de intensidad provocó, según los especialistas, que algunos manantiales arrojaron agua con tierra y eso presagió la posibilidad de una fractura de las capas del subsuelo y la infiltración de tierra. Lo que siguió tras ese evento fue una disminución paulatina de su aforo hasta que el venero quedó seco, como en el caso del balneario San Ramón.

Pero Juan Carlos Pascual, director general del Fideicomiso Agua Hedionda, afirmó que la recuperación de la poza es lenta pero segura y a la fecha se tiene un aforo de 80 litros por segundo, lo que resulta satisfactorio porque el terremoto dejó una chisguete de 20 litros por segundo.

Con esa dotación era imposible llenar la alberca grande con capacidad de 2.6 millones de litros de agua y otros 1.6 millones de litro para una alberca mediana y por eso tuvieron que usar bombas de cinco caballos de fuerza para extraer agua del manantial.

La situación es mejor ahora, dice Pascual, porque el manantial va recuperando sus niveles y obtienen hasta 100 litros por segundo mediante el uso de las bombas.

“Los especialistas del Instituto Mexicano de Tecnología del Agua (IMTA) nos dicen que en el historial de los manantiales que han sufrido daños el venero de Agua Hedionda se recuperó más rápido de lo normal y por eso hay esperanzas de que su recuperación siga avanzando hasta lograr sus niveles de 450 litros por segundo”, expresó.

Lo importante, indicó, es que los estudios arrojan que el agua conserva sus características físico-químicas como la sustancias sulfurosas, la temperatura de entre 26.5 y 27 grados, así como la salinidad y el PH.

Para el director del Fideicomiso la época de estiaje podría estar deteniendo la recuperación del volumen de agua pero una vez que llegue el temporal de lluvia las expectativas son alentadoras.

Juan Carlos Valencia Vargas informó que en el caso del balneario San Ramón, cuyo venero esta completamente seco, realizará la interconexión con el canal Santa Rosa proveniente del manantial del mismo nombre para dotar de agua a parte de la zona de riego que cubría el manantial San Ramón.

En compañía de autoridades del Instituto Mexicano de Tecnología del Agua (IMTA), Valencia Vargas recordó que los manantiales Agua Hedionda, San Ramón y Palo Bolero contribuyen al riego en diferentes regiones, por lo cual se han realizado estudios geofísicos, aforos, análisis de calidad de agua para conocer su estado tras el sismo.

A su vez Carlos Gutiérrez Ojeda, especialista del IMTA, apuntó que con el gobierno del estado, firmó un convenio para que el instituto realice los estudios técnicos y determine las acciones de remediación en torno a los manantiales.