Por Leticia Villaseñor

Cuautla, Mor., 27 de marzo.- Los primeros 45 cuerpos exhumados de la fosa de Jojutla fueron colocados esta mañana en el panteón Jardines del Recuerdo en Cuautla, tras la diligencia de 6 días en el municipio sureño.

El proceso de re-inhumación comenzó la tarde del domingo con el traslado de los restos extraídos, 10 más de la cifra que tenía en archivos la Fiscalía General del Estado, pero todavía faltan por sacar otro número indeterminado de restos humanos encontrados debajo de una madera de triplay, localizada como cama de los primeros 45 restos humanos exhumados. Esos trabajos reiniciarán el próximo lunes.

Esos cuerpos, considerados como no identificados o no reclamados, fueron depositados en esa fosa común en julio de 2014 debido a que el frigorífico del Servicio Médico Forense de la Fiscalía Regional SurPoniente, registró averías por sobrepasar su capacidad para alojar hasta 25 cuerpos.

Los cuerpos extraídos de la fosa de Jojutla fueron resguardados en el camión frigorífico de la Procuraduría General de la República (PGR) instalado en las inmediaciones del cementerio de la región oriente, y alrededor de las 9:00 horas de este lunes comenzó la re-inhumación en las gavetas del panteón de Jardines del Recuerdo, en Cuautla, y los trabajos concluyeron pasadas las 15:00 horas.

Amalia Hernández, vocera de las víctimas, explicó que fueron 44 los restos depositados ya que la PGR analiza un hueso cúbito el cual posteriormente será re-inhumado en el lugar.

También subrayó algunas de las irregularidades detectadas en las inhumación como el hecho de que a varios de ellos no se les practicó la necropsia ni se les tomó las pruebas genéticas para iniciar con el proceso de identificación.

Exhumación en pausa

En conferencia de prensa las hermanas María Concepción y Amalia Hernández, integrantes de la vocería, informaron que la exhumación de Jojutla se detuvo unos días, porque un juez ordenó desarrollar el proceso de re-exhumación de seis cuerpos inhumados en el panteón Jardines del Recuerdo, municipio de Cuautla.

Esos restos humanos son parte de los 119 cuerpos extraídos en junio de 2016 de las fosas de Tetelcingo, Cuautla, donde fue encontrado el cuerpo de su familiar Wenceslao, el caso emblemático que permitió revelar la comisión de irregularidades en el proceso de inhumación en fosas comunes de Morelos.

Las hermanas Hernández  explicaron que en Tetelcingo se tomaron muestras genéticas de todos los hallazgos, de las cuales en seis casos se agotaron sin tener algún resultado concreto; por ello, los participantes decidieron permitir la diligencia con el fin de “hacer hasta lo imposible para identificar esos cuerpos”.

Esos cuerpos fueron donados con antelación a escuelas de Medicina y sumergidos en formol por lo que el perfil genético se perdió y ahora realizarán otro proceso para coadyuvar con su identificación.

“Aprovecharemos que están las instancias federales como la PGR, la Policía de Investigación Científica y la propia Universidad Autónoma del Estado de Morelos, para que se ejecute la ordenanza judicial de la re-exhumación, se tomen las pruebas pertinentes y vuelvan a ser inhumados dichos cuerpos, de lo contrario se perderá dicho proceso”, explicó Amalia Hernández.

La exhumación en Jojutla concluyó la tarde del pasado sábado donde fueron expuestas una serie de irregularidades como el hallazgo de 39 bolsas con 45 cuerpos, mientras que la Fiscalía tenía documentados 35 cuerpos depositados.

El fiscal Javier Pérez Durón declaró entonces que además se encontraron dos cuerpos maniatados y con vestimenta, sin necropsia, otros cuerpos se encontraban presuntamente bajo el resguardo de la PGR, pero por alguna razón todavía no explicada terminaron en el frigorífico de la Fiscalía SurPoniente.

“Aquí queda de manifiesto cómo trabajan las demás instituciones, y lo que se busca es que estos procesos se pulan para las diferentes instancias reconozcan en qué están fallando, dejen de hacer lo que hacen mal y ahora sí aparezcan a los que nos desaparecieron”, exigió María Hernández, otra de las voceras por parte de las víctimas. La fosa de Jojutla fue sellada y bajo el resguardo del Ejército en tanto se reanuden los trabajos.