Por Leticia Villaseñor
Cuernavaca, Mor., 10 de mayo.- La llegada de José Manuel Sanz Rivera al PES, exmanager y operador político de Cuauhtémoc Blanco, no trajo consigo cambios significativos y hasta el momento tampoco han detectado malos manejos de la anterior dirigencia.
Así lo aseguró José Manuel y agregó que la decisión de deponer a José Luis Gómez Borbolla de la presidencia estatal del Partido Encuentro Social (PES) fue de la dirigencia nacional, así como su posible expulsión.
Pese a la situación, el dirigente interino afirmó que no se detectaron malos manejos ni desfalcos a las finanzas, tampoco hubo salidas “en cascada” ni otras expulsiones, por el contrario, dijo que el partido está fuerte, unido y con el convenio de coalición entre MORENA y el PT para la gubernatura, en la que el Cuauh sigue como su abanderado.
Asimismo reiteró que el cambio de candidato de “Juntos haremos historia” a la alcaldía de Cuernavaca es el exárbitro profesional Gilberto Alcalá, y sólo están a la espera de que se concrete el papeleo ante las instancias electorales, y éste, señaló, es el único cambio ya que hasta el momento no hay cambio alguno en las listas presentadas para las 33 alcaldías y sindicaturas, regidurías y diputaciones locales.