•Elección de ministros, magistrados y jueces por voto popular pone en riesgo la autonomía: Gamboa Olea.
Por Antonella Ladino
Los magistrados que integran el pleno del Tribunal Superior de Justicia (TSJ), se solidarizaron con el movimiento contra la reforma judicial, pero no se suspenden labores.
El magistrado presidente del TSJ, Luis Jorge Gamboa Olea, señaló que la reforma también afecta los derechos laborales de quienes trabajan en el Poder Judicial y pone en riesgo la carrera judicial; un sistema que asegura que los jueces lleguen a sus cargos por mérito, experiencia y preparación.
De tal manera que permitir que sean elegidos, a través de procesos políticos expone a la política a presiones externas y compromete su objetividad.
Indicó que la carrera judicial, la preparación y la experiencia son fundamentales para garantizar que quienes ocupan los puestos más altos en el sistema de justicia lo hagan con base en su conocimiento y desempeño y, no por intereses políticos, por lo que cambiarlo es debilitar la calidad y la eficiencia de la justicia.
De acuerdo con Gamboa Olea la propuesta de elección de ministros y magistrados, así como jueces por voto popular pone en serio riesgo la autonomía, imparcialidad e independencia que son esenciales para garantizar una justicia pronta y libre de influencias políticas.
«Nos ponemos firmemente a cualquier intento de centralización que imite la capacidad de los estados para decidir sobre sus propios asuntos judiciales», dijo el magistrado presidente.