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El perro de 16 años era sordo y ciego de un ojo y fue abandonado porque tenía cáncer. Entonces conoció a un hombre que estaba dispuesto a ofrecerle una última oportunidad.
El perro Henry tenía unos dieciséis años de edad cuando su familia lo entregó al refugio, tal vez debido a su diagnóstico de cáncer testicular. Ni siquiera se molestaron en buscar opciones terapéuticas y se deshicieron de él cuando más lo quería. El inesperado abandono marcó a Henry, dejándole sin esperanza.
Con la renuncia de Henry a sus ganas de vivir, su cáncer se deterioró siniestramente. Ser sordo y ciego de un ojo empeoró su estado físico y el dolor constante le hizo perder la mayor parte de su movilidad. Cuando un hombre llamado Zach Skow vio su estado, supo que el mal canino no permanecería más que unas pocas semanas.
Zach decidió acoger a Henry en una casa de acogida para enfermos terminales y hacer que se sintiera querido y apreciado en sus últimos días. Sin embargo, un asunto extraordinario tuvo lugar después de una pérdida de vidaHenry pasó su primera noche con Zach y su cariñosa familia. Henry descubrió la electricidad para ponerse de pie y caminar hasta el patio Se sintió bendecido por tener un hogar que lo buscaba de nuevo, ¡y eso reavivó su chispa!
¡Este cambio radical se fue haciendo más grande a medida que Henry empezaba a sentirse mejor cada hora! Sus paseos se convirtieron en galopes y Zach resolvió conseguirle ese tratamiento quirúrgico para eliminar el cáncer. Después de eso, ¡no había manera de detener a Henry! Fue como un renacimiento para él cuando comenzó a disfrutar como un perrito de nuevo!
Zach cree que la aceptación de la casa fue la variable clave para aumentar la moral de Henry y ayudar a su recuperación. Ahora Henry ha sido adoptado por una magnífica familia, que ha prometido proporcionarle un gran retiro durante los últimos años de su vida. ¡Qué milagro tan asombroso!