Por elinsurgente.mx

Andrés Graff, un usuario de la plataforma de tranporte Uber, denunció el día de ayer en redes sociales que fue víctima de secuestro por un conductor, donde fue drogado, golpeado y “tirado” en Tultitlán, Estado de México.

 

Aseguró que la madrugada del sábado, luego de convivir en un bar de la Condesa, en la calle de Nuevo León, solicitó el automóvil.

Narró que el conductor llegó al punto, lo reconoció por su nombre y sabía a dónde se dirigía. No recuerda las características del vehículo, pero sí, que durante el trayecto, el conductor le ofreció una botella de agua y perdió el conocimiento.

Aproximadamente a las 10:30 horas del sábado pude recuperar algo de conciencia para buscar a alguien que me prestara una computadora o un teléfono y contactar a mi novio”, dijo.

A Andrés le fueron practicadas pruebas toxicológicas y arrojaron que fue sedado con una combinación de cuatro ansiolíticos, lo que provocó que no recuerde cómo sucedieron los hechos; además, le robaron tarjetas de crédito, de las cuales han retirado unos 40 mil pesos.

Uber negó esta versión e informó en un comunicado que el usuario no abordó el vehículo solicitado a través de la plataforma, tanto en el día y hora señalados.

Señaló que el conductor asignado canceló el viaje de Andrés porque no se hizo presente. Incluso, inició un nuevo viaje de forma inmediata, completándolo sin inconveniente.

Por este caso el secretario de Seguridad Pública, Raymundo Collins, aseguró que la dependencia estará en pláticas con Uber para acordar que la dependencia pueda tener acceso a la información en tiempo real, tanto con sus choferes y con los usuarios.

“Vamos a entrar en contacto junto con la compañía para tener acceso a lo que está pasando en el momento; ellos tienen las tecnologías y las vamos a tratar de tener nosotros”, planteó Collins.