Por Leticia Villaseñor
Cuernavaca, mor., 17 de abril.- “Se metieron con tres niños inocentes, ya estuvo… no nos vamos a quedar con los brazos cruzados”, expresó el gobernador Cuauhtémoc Blanco Bravo en torno a los hechos violentos registrados el pasado sábado en un restaurante donde asesinaron a los menores y otros tres adultos.
No se vale lo que pasó en Cuautla, dijo el mandatario en rueda de prensa en Palacio de Gobierno, donde se dio a conocer la estrategia de Seguridad para el Fin de Semana Mayor donde estuvo acompañado de su gabinete de seguridad y de empresarios del sector turístico.
“Está involucrada una persona, todos sabemos quién es, hay indicios que así lo refieren”, dijo el gobernador sin mencionar el nombre de Raymundo Isidro Castro Salgado, “El Ray”, presunto líder en Morelos del Cartel Jalisco Nueva Generación que opera al oriente de la entidad y disputa el control del narcomenudeo en aquella región.
Blanco Bravo aseguró que él y su gabinete no cesarán en esfuerzos para acabar con la inseguridad que envuelve a Morelos, tal y como lo prometió en campaña, recordó.
El gobernador defendió la labor de la Comisión Estatal de Seguridad y afirmó que sí se han realizado detenciones importantes de delincuentes, presuntos integrantes de la delincuencia organizada, pero por falta de denuncias y pruebas contundentes en su contra han sido liberados.
El titular del Ejecutivo aseguró que está lista la estrategia para contrarrestar la posible respuesta del grupo criminal que lidera “El Ray, quien el pasado sábado presuntamente se encontraba en el restaurante “Los Estanques” en compañía de familiares de dos médicos de la región oriente, y hasta allí llegó un grupo de sicarios para tratar de asesinarlo. El saldo fue de cuatro personas muertas en el lugar, dos niñas y dos adultos, y posteriormente el deceso de otras dos víctimas, un menor de cinco años y una mujer de 54 años.
Esta es la realidad que se vive en Morelos, así nos dejaron el estado, recalcó el Cuauh, quien hizo referencia a la campaña en su contra emprendida por presuntos adversarios políticos quienes, dijo, aprovechan estas situaciones para atacarlo.