Por JUSTINO MIRANDA
CUERNAVACA, Mor. 12 de mayo.- El candidato del Partido Movimiento Ciudadano a la alcaldía de Cuernavaca, Alejandro Villarreal Gasca, afirmó que su único compromiso es con la ciudadanía y no con grupos políticos, ya que es a la sociedad a la que responderé a partir de enero del 2016 cuando comience a presidir el Ayuntamiento de Cuernavaca.
En su presentación del plan de acción “Cuernavaca en Movimiento” ante representantes de diversas organizaciones civiles, Villarreal Gasca indicó que no es con experimentos ni copiando modelos externos que no responden a las necesidades de Cuernavaca, como se va a solucionar la crisis de Cuernavaca. Lo que se requiere es trazar un traje a la medida en términos financieros, de servicios y de desarrollo, cuyos factores mantienen sometido a la ciudad.
En las instalaciones del Sindicato Nacional de Trabajadores de Salud Morelos, Alejandro Villarreal, prometió que su gabinete municipal será integrado por colaboradores profesionales y experimentados, que cuentan con los conocimientos para ocupar las áreas operativas del municipio, cuya responsabilidad no se puede delegar a personas que como hoy ocurre, están ahí por amiguismos, compadrazgos y el pago de cuotas políticas.
El candidato del Movimiento Ciudadano consideró impostergable que el Ayuntamiento de Cuernavaca sea sujeto a políticas de transparencia y rendición de cuentas, siempre de cara a la sociedad, y por eso mencionó la importancia de que Mirna Zavala, ex presidenta consejera del Instituto Morelense de Información Pública (IMIPE) sea la candidata a sindico, en fórmula para acompañar al presidente municipal.
Alejandro Villarreal fue contundente al manifestar que en Cuernavaca se requiere un refinanciamiento y flujo de efectivo a partir de impulsar una administración pública eficaz, donde los recursos que se obtengan a partir de la recaudación de impuestos y las aportaciones que recibe el municipio se ejerzan sin discrecionalidades.
Asimismo indicó que es momento de poner orden en la ciudad a partir de un desarrollo urbano que deje atrás el anarquismo en colonias y zonas residenciales, recuperando la esencia de un sitio con vocación turística, debidamente señalizado, económicamente pujante, con servicios de calidad y que beneficien a todos sus habitantes.