Por JUSTINO MIRANDA

CUERNAVACA, Mor. 8 de mayo.- Un grupo especial de la Policía Federal irrumpió alrededor de las 15:00 horas en el exclusivo fraccionamiento habitacional de Tabachines, en Cuernavaca, para detener a Francisco Salgado Valladares, ex Subdirector de la Policía municipal de Iguala, Guerrero.

El ex mando policial tiene orden de aprehensión por su presunta responsabilidad en el delito de delincuencia organizada, por supuestos nexos con la organización delictiva ‘Guerreros Unidos’, señalada como responsable de la desaparición de 43 estudiantes de la normal de Ayotzinapa, en septiembre de 2014.

Residentes del lujoso fraccionamiento residencial presenciaron el ingreso de las fuerzas federales y, contaron, luego se dirigieron a una casa habitación donde presuntamente se refugiaba el ex mando policial de Iguala, Guerrero. Ninguno de los testigos dio cuenta de disparos de arma de fuego.

El operativo fue realizado sin avisar a la Comisión Estatal de Seguridad Pública, la Fiscalía General del Estado, la delegación de la PGR y la 24 Zona Militar.

Presuntamente, el ex subdirector de la policía de Iguala, recibió de ‘Guerreros Unidos’ la cantidad de 600 mil pesos, por proteger las actividades del grupo criminal en la zona.

De los implicados en el caso Ayotzinapa, aún queda por capturar al ex secretario de Seguridad Pública de Iguala, Felipe Flores Velázquez, quien al igual que Valladares Salgado, participó en la detención de los estudiantes desparecidos.

Salgado Valladares fue llevado de inmediato a la Ciudad de México para ponerlo a disposición de la Procuraduría General de la República (PGR).

 

Zona de refugio

El fraccionamiento Tabachines se encuentra a unos 10 kilómetros de distancia del municipio de Jiutepec, donde agentes de la Seido, del Ejército y de la Policía Federal efectuaron en enero pasado un operativo para detener a Felipe Rodríguez Salgado, alias “El Cepillo”, uno de los sicarios que participaron en la masacre de 43 estudiantes de la normal de Ayotzinapa. “El Cepillo” se refugiaba en una casa de la calle México 68, colonia Deportiva del poblado de Tejalpa, cuyo municipio es gobernado por el PRD.

En ese operativo fueron detonadas armas de fuego de grueso calibre y momentos después fueros detenidos varios jóvenes que se encontraban ingiriendo bebidas alcohólicas en la vía pública, entre ellos el presunto sicario de la organización criminal Guerreros Unidos.