Por Leticia Villaseñor
Cuernavaca, Mor., 12 de enero.- Los intentos de linchamiento, como el registrado anoche en el barrio de Gualupita, en pleno centro histórico de Cuernavaca, son reflejo del hartazgo de la sociedad por la inseguridad, reconoció Carlos Benítez Urióstegui, subsecretario de Gobierno, pero advirtió que el Ejecutivo estatal no es partidario de la justicia por propia mano.
Ayer los vecinos del popular barrio detuvieron a un sujeto a quien señalaron como un presunto ladrón, lo amarraron y colgaron de los pies sobre los arcos de un antiguo acueducto en desuso. Por la madrugada, a través de la red social de whatsup de vigilancia vecinal reportaron el allanamiento de un local y una vivienda sobre la calle de Melchor Ocampo por lo que fueron tras ellos.
A decir de uno de los vecinos, encontraron a dos jóvenes en el parque del mismo nombre, y sólo por su actitud sospechosa los retuvieron, amarraron y golpearon. Presuntamente varios vecinos los identificaron como presuntos asaltantes.
Sobre el caso, Benítez Urióstegui dijo que reconoce que la inseguridad en la entidad no ha sido abatida pero tampoco, advirtió, se debe hacer justicia por su propia mano.
“Los temas de inseguridad aquejan a todo el país, que no es justificación, pero puedo decir por cada caso como el de anoche hay cientos de respuestas positivas a través de estos grupos donde la sociedad se vuelve un factor primordial para evitar ciertos delitos, como los robos a casa-habitación”, dijo.
Aseguró que en Morelos se han conformado mil 200 Comités de Vigilancia Vecinal (Comvives), que han dado resultados positivos como el alertar a los elementos policiacos prácticamente de manera inmediata a la ejecución de un delito.
El subsecretario declaró que los cuerpos policiacos están en capacitación de manera constante pero recalcó que el involucramiento de la sociedad es básica porque “es imposible tener a un policía por cada ciudadano o por cada delito”.
Sin embargo, reconoció que la sociedad no tiene confianza en la policía y tampoco en las autoridades competentes para interponer sus denuncias, lo que da un falso positivo en las estadísticas a la baja de la incidencia delincuencial.
Benítez Urióstegui aseguró que el gobierno del estado trabaja para recuperar la confianza de la sociedad y ejemplificó sobre las mantas colocadas en diversas colonias en las que se advierte sobre el linchamiento de cualquier persona que sea sorprendida cometiendo un ilícito.
Sobre el particular, admitió que es una llamada de atención para las autoridades ante las exigencias de la sociedad, por lo que se avocan a trabajar con los inconformes para evitar situaciones más violentas como el linchamiento de presuntos delincuentes.