Leticia Villaseñor
Cuernavaca, Mor., 19 de diciembre.- “La Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN) se extralimitó en sus funciones al otorgar una suspensión provisional al presidente municipal de Cuernavaca, Cuauhtémoc Blanco Bravo, en el juicio político que interpuse como ciudadano en su contra”, declaró el abogado constitucionalista Raúl Camilo Carrancá y Rivas.
En una rueda de prensa el litigante afirmó que “la misma suspensión lo menos que produce es extrañeza, de ser así, el máximo tribunal se está extralimitando en sus funciones debido a que el pleno del Congreso local analizó y votó, con una abrumadora mayoría, la culpabilidad por acción y omisión del alcalde.
Se me hace muy raro que le hayan otorgado una improcedente suspensión constitucional, que no puede ir en contra de nuestra Carta Magna”, dijo Carrancá con evidente molestia por la decisión de la Corte.
Detalló que la SCJN no suspendió el proceso de destitución y éste continuará sin que se pueda ejecutar el resolutivo, en caso de ser adverso al edil, hasta que el pleno de la Corte se pronuncie de fondo por lo hizo un voto de confianza para que lo haga a la brevedad.
Carrancá y Rivas convocó a rueda de prensa pero desde el inicio dejó claro que no contestaría preguntas. Así señaló que la Corte no lo ha notificado de manera oficial, a pesar de ser el promotor de dicho proceso, el cual interpuso ante el Poder Legislativo local el pasado 9 de diciembre.
Durante su exposición “contundente y categórica”, el abogado hizo una serie de señalamientos sin concordancia, confundió al Congreso del Estado con el Tribunal Superior de Justicia y dio por hecho que el Poder Judicial de Morelos encontró culpable a Blanco Bravo por 27 votos en el proceso del juicio político. En realidad el que votó procedencia del juicio fue el Congreso local, mientras que el TSJ instaló el pasado sábado la Comisión Integradora para analizar el expediente, además de que está en periodo vacacional y dicho resolutivo no ha sido votado por los 16 magistrados que integran el pleno.
Pero esa no fue la única inconsistencia porque al referirse a la huelga de hambre del alcalde capitalino en la diócesis de Cuernavaca, el pasado fin de semana, señaló como “una situación muy grave que un violador consuetudinario de la Constitución (en alusión a Blanco) pueda seguir en su cargo sin un señalamiento severo porque atenta contra un estado de Derecho.
«Se apostó en la catedral de la República (sic) siendo alcalde en funciones, va a la huelga de hambre en el atrio con lo que violó la Constitución porque el Estado mexicano es laico”, lo cual, advirtió, presentará más adelante “como una prueba superviniente aduciendo lo que estoy aduciendo (sic)”.
El docto en Derecho criticó que el Cuauh hizo de la catedral una sede alterna de la comuna y expuso que ese tipo de situaciones no se tiene registro oficial.
“El presidente municipal tomó decisiones en el ejercicio de su mando desde la sede católica, no recuerdo con exactitud pero era algo relacionado con el Mando Único, creo que hizo algún cambio, removió a un síndico y creo que también a un regidor”, expuso sin certeza y confundido.
Finalmente exigió al exfutbolista que por dignidad, por moral y por principio y porque el alcalde sabe que violó la ley, renuncie, ello a pesar de que el cargo es irrenunciable al resultar electo en votación y lo conducente es una separación del cargo.