Por Leticia Villaseñor
CUERNAVACA, Mor., 10 de julio.- La nueva encargada de dar seguimiento a la Alerta de Violencia de Género (AVG) en el estado, Iraís Ortega Zuñiga, advirtió que tomará de 12 a 14 meses cumplir con las recomendaciones de la Comisión Nacional para Prevenir y Erradicar la Violencia Contra las Mujeres (Conavim), a fin de evitar la emisión de la alerta en la entidad.
En 2014, la Comisión Independiente de Derechos Humanos (CIDH) solicitó al Conavim emitir la alerta tras la documentación de 633 casos, comprendidos al periodo 2000- 2013.
Ante la aceptación de la solicitud, se integró un Grupo de Trabajo con personal del Instituto Nacional de las Mujeres, Conavim, Instituto de la Mujer para el Estado de Morelos (IMEM), Facultad Latinoamericana de Ciencias Sociales y el Centro Regional de Investigaciones Multidisciplinarias (CRIM) de la UNAM.
En agosto pasado, se emitieron 15 recomendaciones para que el gobierno del estado cumpliera con cada una de ellas en un plazo de seis meses, cuyo tiempo se agotó en marzo pasado pero presentó un informe al Grupo de Trabajo; hasta el momento se desconoce la resolución oficial. En caso de ser negativa obligará a las autoridades a emitir la AVG 10 días después de su publicación.
En ese contexto, el pasado jueves Ortega Zúñiga declaró que tan sólo para dar cumplir con una de las 15 recomendaciones -que los feminicidios documentados por la CIDH Morelos no queden impunes-, lo que tomará más de un año y será responsabilidad de la Fiscalía General del Estado determinar cuáles y cuántas carpetas de investigación se abrirán.
Sin embargo, eludió pronunciarse por los feminicidios cometidos previos o posterior al tiempo documentado, es decir, sólo consideró los feminicidios cometidos entre 2000-2013.
Juliana Quintanilla, de la CIDH Morelos y principal impulsora por el emisión de la AVG, declaró que si el Grupo de Trabajo analiza a cabalidad el cumplimiento de las recomendaciones, sería inminente la emisión de la alerta de género, ya que no hay siquiera un censo confiable desde la Fiscalía sobre el número de casos.
Así también, criticó, no se siguen los protocolos ni lineamientos que estipulan que toda muerte violenta de una mujer debe considerarse de inicio como un feminicidio y, sólo si el curso de las indagaciones arrojan que el crimen recae en otra categoría, debe descartarse como tal.
Foto: Jorge Arturo Gama / CiudadanosMx