Po Oswald Alonso
Buscar, también en Morelos a Joaquín Guzmán Loera, tiene mucha lógica. Nuestra entidad ha servido de refugio de los más grandes capos que ha habido en México; es una de las rutas de trasiego más peleadas en el país por la conexión que representa para enlazar al estado de Guerrero con el Distrito Federal.
Pero sobre todo, es un estado donde abunda la corrupción, la complicidad en las autoridades municipales y estatales, ambiente propicio para que Guzmán Loera, pase unas vacaciones veraniegas en “Morelos la Primavera de México”.
Existe un ingrediente que hace más atractivo a nuestro territorio, no menos importante que lo antes descrito, que lo hace pelear un lugar importante para refugio de los capos mexicanos: El aeropuerto “internacional” Mariano Matamoros, localizado en el municipio de Temixco,
El aeropuerto parece haber sido diseñado y construido para los grandes hombres de negocios ilícitos. Ha servido para recibir a Amado Carrillo Fuentes “El señor de los cielos”, sus familias y cómplices del cártel de Sinaloa, como lo es el principal socio de Joaquín, Ismael Zambada.
También, ha servido de gran bodega para el almacenamiento de cocaína proveniente de Centroamérica, cuyo destino es la Ciudad de la Esperanza. Varios expedientes de PGR así lo confirman. El caso más reciente fue la sentencia a Agustín Montiel, excoordinador de la policía ministerial de la administración del entonces gobernador Sergio Estrada Cajjgal.
La justicia federal lo condenó por sus vínculos con el narcotráfico, comprobó que le brindaba protección, además de trasladar en unidades oficiales cargamentos de droga para entregar a los jefes de la plaza.
Arturo Beltrán Leyva, era otro cliente favorito del aeropuerto que es preciso decir, ahora sólo presta atención a vuelos privados -ahora que pensándolo bien (sospechosamente) sería el aeropuerto ideal para escapar al no haber constante tránsito aéreo ni vigilancia extrema -.
Juan José Esparragoza, considerado el “Padrino de los narcos”, fue uno de los capos que vivió durante años en Morelos. Utilizaba el Mariano Matamoros como si fuera de él para trasladarse sobre todo al norte del país. Llegaba a la hora que quería sobre todo para acompañar en su momento a “El señor de los cielos”.
No sería pues extraño que el aeropuerto de los capos sirviera una vez más para recibir a tan distinguido hombre que ha puesto en vergüenza internacional al presidente Enrique Peña Nieto, durante su gira por Francia, donde ha tenido que dar obligadamente una conferencia para sólo decir que es una “afrenta” para el país.
Quién dudaría que el “chapo” usó nuestro aeropuerto para hacer lo que otros capos han hecho? Pienso que nadie; o usted si?