Por Leticia Villaseñor
CUERNAVACA, Mor., 20 de julio.- Cristian Barrera Bahena desapareció el pasado 02 de julio del municipio de Xochitepec, al sur de la entidad, del taller mecánico donde laboraba.
A pesar de los testimonios de que fue privado de la libertad por dos sujetos, la Fiscalía General del Estado boletinó la información y su desaparición como persona extraviada.
Nicolasa Bahena Barrera, madre de Cristian, explicó que su hijo, de 23 años y de oficio mecánico, fue visto por última vez la noche del 2 de julio a las 19:30 horas en el taller en el que laboraba.
“Uno de sus compañeros contó que dos hombres llegaron a bordo de una motocicleta a buscarlo y luego de platicar con él Cristian dijo que regresaba más tarde porque iba a revisar un carro. Se subió a su vehículo, un Golf 93 color verde con placas PXU3603, con uno de los hombres, el otro lo siguió en la moto”, relató.
Cristian no llegó esa noche a su domicilio lo que causó consternación a su madre, porque “él avisaba dónde estaba y si no llegaría a dormir, tampoco apagaba el celular”, dijo su madre.
Por lo anterior Nicolasa buscó entre familiares, conocidos y compañeros de trabajo pero nadie dio referencia de su paradero.
“Fui a la Fiscalía estatal a denunciar su desaparición pero el Ministerio Publico, de entrada, se negó a iniciar la denuncia porque debía esperar 72 horas de su desaparición”, sólo ante la insistencia de la mujer, el elemento accedió e inició su declaración, en la que, subrayó, hizo constar que su hijo estaba desaparecido al igual que su vehículo.
“Las autoridades fueron muy insistentes en saber si mi hijo se drogaba o se juntaba con personas de mala reputación”, dijo.
Al terminar, el personal de la Fiscalía la envió a buscarlo a hospitales, sectores y los lugares que su hijo frecuentaba. Pero al revisar la copia de su declaración, se percató que la denuncia se hizo como extraviado; el documento tampoco refirió el reporte del automotor.
Al regresar a la Fiscalía para ampliar su declaración, las autoridades se rehusaron y la remitieron a Derechos Humanos, donde le confirmaron que las autoridades de la Fiscalía debían ampliar su declaración.
“De Derechos Humanos me mandaron a las oficinas generales y de ahí al Ministerio Público de Xochitepec, de ahí a Servicios Periciales donde me tomaron una prueba de sangre y muestras dentales de mi hijo, que entregué, pero no me dieron ningún documento que testificara esa entrega”, abundó.
Dos semanas ha pasado Nicolasa en puros trámites, “sin ningún resultado, no me dicen nada sobre mi hijo, no veo que investiguen y una conocida, quien es abogada-, al revisar la denuncia me dijo que las autoridades han cometido muchas irregularidades”, destacó.
La madre de Cristian, exigió se active de inmediato el protocolo para la búsqueda de personas desaparecidas, el rastreo del teléfono celular; el reporte de robo del vehículo a Plataforma México y que sean revisadas las cámaras de C5 ubicadas en el Crucero de la Cruz, en Xochitepec, lugar donde se ubica el taller mecánico, y verificar si hay imágenes de los sujetos.
Cristian es un joven de tez morena, 1.75 m de estatura y cabello color negro. Como señas particulares tiene tatuajes, uno en el brazo derecho que dice “niebla”; uno en el abdomen que es un infinito y otro más en el pecho que es una calavera con alas.